Aparcar en Madrid saldrá muy caro por la noche e incluso los fines de semana, si el estudio que está realizando actualmente la alcaldesa de Madrid se lleva hasta sus últimas consecuencias.
Carmena desea que el SER, o el aparcamiento regulado, se amplíe por la noche, los fines de semana y días festivos en la capital, a partir del año que viene, y que se aumente un 25% la tarifa que se paga actualmente.
Con este tipo de medidas, unidas a las ya conocidas de prohibir el acceso de vehículos con muchos años, Manuela Carmena pretende obligar a que los conductores dejen el coche en casa al hacer desplazamientos por la almendra central, atacando lo que más duele, el bolsillo de los consumidores.
El Consistorio de Ahora Madrid extenderá el horario de prestación del SER a partir de las 21.00 horas de lunes a viernes y durante los fines de semana y festivos, a esta medida se suma la prohibición de que los vehículos de gasolina anteriores a 2000 y los diésel matriculado antes de 2006 puedan aparcar en los barrios con parquímetros, que entrará en vigor a partir de 2020.
A partir de 2018 se van a establecer zonas o plazas específicas con periodos de estacionamiento más reducidos para restringir el tiempo que pasan en ellos los vehículos que no son de vecinos, limitando progresivamente el tiempo de permanencia de las 4 horas actuales.
El gobierno va a incrementar para los residentes las plazas en los aparcamientos de concesión municipal en detrimento de la oferta de los visitantes a la ciudad, lo que provocará un aumento del precio del ticket de los parkings privados de la ciudad, ante el aumento de la demanda y una menor oferta.
El Ayuntamiento de Madrid está planteándose la opción de aumentar la zona de aparcamiento regulado más allá del borde de la M-30, la primera prueba piloto se hará en el segundo semestre de este año en el barrio de Begoña.