Escasos cinco minutos son los que separan el municipio de Boadilla delMonte del hospital oncológico más importante de Europa, un gran edificio junto a la M-506 junto al municipio de Villaviciosa de Odón.
El que fue bautizado como el mejor hospital privado en la lucha contra el cáncer de toda Europa, hoy solo es una ruina que cada día es invadida por jóvenes que desean pasar un rato tranquilo entre sus paredes.
No había llegado el año 2000 cuando se aprobaba en el pleno del ayuntamiento de Villaviciosa de Odón la venta de unos terrenos por un precio simbólico, para que en este municipio recalara el futuro de la lucha contra el cancer, una bandera que en aquel momento llevaba la empresa Centro de Investigación y Tratamiento Oncológico (CITO).
El proyecto contentaba a todas las partes, a los vecinos por el trabajo que generaría (el 80% de los trabajadores no cualificados tenían que ser vecinos de dicho municipio) y además el hospital vendría acompañado de otras instalaciones, como un hotel y un centro de ocio para poder dar servicio a los familiares durante sus tratamientos, algo que también alegraba a la empresa promotora.
No parecía ser un pelotazo de los que posteriormente tantos ejemplos se podrían ver, con una inversión privada superior a los 60 millones de euros, el propio ministro de Sanidad, José Manuel Romay Beccaría acudió hasta estas instalaciones para proceder a la puesta de la primera piedra, aunque los vecinos habrían preferido que acudiera a poner la última, visto el estado actual del proyecto.
El proyecto quebró por diferencias entre los socios y el abandono y el hurto ha provocado que en los más de quince años que lleva abandonado, solo puede traer algún disgusto en forma de accidente a los grafiteros que usan sus paredes como lienzo.