La actual ministra Isabel Celaá mantendrá la prueba de reválida para los alumnos de 4º de la ESO, sin cambios apreciables a las pruebas que se realizaron el año pasado por el ministro del PP Íñigo Méndez de Vigo en los colegios e institutos de Boadilla del Monte.
Serán durante este año escolar 2018 – 2019, en el que los alumnos de Boadilla del Monte tendrán que realizar cuatro exámenes -Lengua Castellana y Literatura, Lengua Extranjera, Matemáticas y Geografía e Historia- con una duración máxima de una hora por asignatura y en un máximo de cuatro días, siempre con una finalidad muestral, para ver la situación del colegio y que no puede afectar al curriculum escolar del alumno.
Según las opiniones de los expertos, este real decreto que se va a firmar permitirá ganar un poco más de tiempo para discutir en el congreso una ley orgánica con el resto de partidos, la conocida como ley Celaá, a la espera de conseguir los apoyos necesarios para poder llevarla a buen puerto, algo que ahora se ve muy lejano.
Los expertos ya están protestando acerca de la necesidad de hacer pruebas que no afectan al expediente del alumno y que son desmotivadoras, generan estrés en el alumnado (Aunque no sean puntuables) y obliga a un trabajo extra a los profesores.
A finales de 2016 el entonces portavoz del PSOE Antonio Hernando indicó la necesidad de eliminar las pruebas inmediatamente, un paso que finalmente no parece que se vaya a dar durante este primer año en su vuelta al gobierno.