Madrid es mucho más que la Plaza Mayor, Callao, la Puerta del Sol, Gran Vía, o el Santiago Bernabéu. Pese a que las principales rutas turísticas recorren casi siempre los mismos lugares, la capital madrileña ofrece infinidad de rincones insólitos en los que descubrir un perfil diferente de esta metrópoli siempre sorprendente.
Espacios únicos y originales, pequeñas joyas arquitectónicas que parecen sacadas de otras ciudades, épocas y estilos. Desde una gran Cabeza Colosal mexicana hasta un pedacito del Muro de Berlín, pasando por la hermana gemela de la Torre de Belém.
Aquí os dejamos una ruta por los lugares menos conocidos y más extraordinarios de la capital, que seguramente no hayas visitado aún. Te transportarán lejos de esta ciudad, pero sin moverte realmente: es el otro Madrid.
2Un pedacito del muro de Berlín
Durante gran parte del siglo XX un muro separó una ciudad, un país y el mundo entero. Berlín vivió durante años dividida por un bloque de hormigón y cemento de más de 150 kilómetros y casi cuatro metros de altura.
Su caída se produjo el 9 de noviembre de 1989. Y debido a la hermandad entre Berlín y Madrid, tres bloques del muro fueron trasladados a la capital española para que sus habitantes pudieran recordar este episodio negro de la historia.
Esos fragmentos cuentan con sus pinturas originales. Están instalados en el Parque de Berlín, entre las calles de Príncipe de Vergara y Ramón y Cajal, en pleno Chamartín. Un rincón muy alemán idóneo para disfrutar de un buen paseo.
