Pocos platos hay tan madrileños como un buen cocido. Este delicioso y contundente manjar, capaz de resucitar a un muerto, levanta pasiones tanto dentro como fuera de la capital.
Los ingredientes suelen ser siempre los mismos. Eso sí, como en casi toda receta tradicional, cada maestrillo tiene su librillo. Cada restaurante aporta sus propios toques de sabor, lo que les hace diferenciarse del resto.
Los componentes clásicos del cocido son: sopa, garbanzos, repollo, patata, zanahoria, morcilla, chorizo, hueso de jamón, tocino, morcillo y gallina. Algunos se atreven con manitas de cerdo o incluso costillas, mientras los más tradicionales se oponen a cualquier pequeña variación.
Lo que sí varía es la forma de servirlo: en dos vuelcos, en tres, en cuatro… y hemos encontrado alguno que tiene más de diez. No hay una forma correcta de hacerlo. En Madrid se servía originalmente en tres vuelcos, porque había que inclinar tres veces el puchero para poder servirlo.
De cualquier manera, la mayoría de los establecimientos se mantienen fieles a la receta original, sin distar demasiado unos de otros. Aquí te dejamos los cocidos que te dejarán la tripa llena y el corazón contento.
3La Cruz Blanca de Vallecas
El Club de Amigos del Cocido lo ha elegido en más de una ocasión como ‘el mejor cocido del mundo’.
Antonio Cosmen es el cocinero del restaurante, el cual confiesa que su único secreto es preparar el cocido a fuego lento desde el día anterior. ¡Llega a tardar hasta 15 horas!
La fuente de carnes también contiene tocino, berza, chorizo, morcilla y gallina. Si no puedes con todo, te ofrecen un tupper. Así puedes continuar la comilona cuando hayas hecho algo de hueco en el estómago.
El precio es de 21€ por persona. Lo encontrarás en la calle de Carlos Martín Álvarez 58, en Puente de Vallecas.