Si piensas en la gastronomía alemana, seguramente lo primero que se te venga a la cabeza son sus deliciosas salchichas y espectaculares cervezas.
Sin embargo, la cocina germana no se reduce únicamente a eso. Presenta una gran variedad de platos, enriquecidos por las particularidades de cada región y por la influencia de los países vecinos.
Distintos tipos de carne, patatas y coles forman también parte importante de las generosas raciones que se sirven en suelo alemán. Todas ellas regadas, además de por la típica cerveza, por su famosa sopa y sus buenos vinos.
Te presentamos un recorrido para disfrutar de la mejor cocina alemana. ¡La dieta puede esperar al año que viene!
1Horcher
Horcher es el restaurante por excelencia para sucumbir a las especialidades alemanas creadas en la capital madrileña.
Este establecimiento, inaugurado en el año 1943 por Otto Horcher, es todo un clásico. Otto fue el encargado de extender más allá de sus fronteras, el buen hacer que su padre, Gustav Horcher, había demostrado en su distinguido restaurante de Berlín.
Casi ocho décadas después, su carta sigue fiel a los platos de siempre: el goulash con páprika y spätzle, el stroganoff a la mostaza y los postres como el crêpe Sir Holden o el maravilloso baumkuchen, un famoso pastel de árbol loncheado, con helado de vainilla y chocolate caliente por encima.
Se localiza en la calle de Alfonso XII 6, a escasos metros de la Puerta de Alcalá y del Parque del Retiro.