Madrid no solo es el triángulo del arte formado por el Museo del Prado, el Reina Sofía y el Thyssen. Varios museos más pequeños de la capital pueden competir en calidad con estos grandes templos de la pintura. Uno de ellos es el Museo Lázaro Galdiano.
Conoce la historia de José Lázaro Galdiano. Su amor por los libros, el coleccionismo y la cultura le hizo regalar a Madrid una de las mejores colecciones privadas de arte del mundo. No pierdas la oportunidad de visitar un lugar tan increíble como su museo.
LA HISTORIA DE JOSÉ LÁZARO GALDIANO
Para hablar de la historia del Museo Lázaro Galdiano hay que hablar de la persona que hizo posible que los madrileños pudieran disfrutar de tal cofre del tesoro de la cultura.
José Lázaro Galdiano nace en Baire (Navarra) el 30 de enero de 1862. Perteneciente a una familia pudiente, decide dedicar su vida a estudiar derecho en las mejores universidades del país.
Después de pasar por otras ciudades como Barcelona o Valladolid, acaba instalándose en Madrid. En la capital comenzaría lo que sería su negocio más fructífero y que le elevaría a los altares.
José Lázaro Galdiano se convertiría en editor de una de las revistas más importantes del momento: ‘La España Moderna’. En esta publicación escribirían autores de gran nivel como Emilia Pardo Bazán, Benito Pérez Galdós, Clarín o Unamuno.
LA IMPORTANTE BIBLIOTECA QUE CUSTODIA EL MUSEO
Su incursión en el negocio editorial le hizo convertirse en un personaje popular en los círculos intelectuales del Madrid de la época. Pero, lo que más le aportó a Lázaro Galdiano fue poder encontrar su gran pasión.
José Lázaro Galdiano fue uno de los bibliófilos más importantes de la historia de España. Su profesión le permitió crear una biblioteca de gran tamaño que contaba entre sus estanterías obras de gran relevancia.
La biblioteca de este editor llegó a tener más de 20.000 volúmenes. En la actualidad se conservan en el actual Museo Lázaro Galdiano. Alrededor de mil libros de esta colección pertenecían a su gran amigo Antonio Cánovas del Castillo. Este los adquirió tras el asesinato del presidente del Gobierno.
LA IMPORTANCIA CULTURAL DEL ‘PARQUE FLORIDO’
El amor que tenía José Lázaro Galdiano por la cultura y el arte le hizo convertirse en un gran coleccionista. Pintura, armas, monedas, esculturas, libros… todo era bienvenido en su casa.
Después de viajar por todo el mundo adquiriendo objetos, en 1903 contraería matrimonio con Paula Florido y Toledo. Esta era una dama muy rica argentina que había enviudado hasta en tres ocasiones.
La gran fortuna que juntó el matrimonio les permitió construirse un impresionante hogar en una de las zonas más caras de la capital. Este era conocido como el ‘Palacete del Parque Florido’, en el número 144 de la calle Serrano.
Este lugar se convirtió en la sede de sus preciadas colecciones. Los Lázaros querían presumir de sus objetos, por esto organizaban continuamente fiestas para la alta aristocracia madrileña.
Uno de los grandes objetivos en la vida de José Lázaro era reivindicar la vuelta de todas aquellas obras de arte español que habían salido de las fronteras de nuestro país.
LA COLECCIÓN POR ENCIMA DE TODO
Durante la Guerra Civil, José Lázaro Galdiano abandonó el país y pasó la contienda resguardada entre París y Nueva York. Su hermoso palacete quedó abandonado hasta que el gobierno de la República lo incautó para convertirlo en una residencia de jubilados. Gracias a esto sus tesoros no fueron saqueados, sino protegidos y trasladados a Valencia por el gobierno republicano.
Cuando terminó la guerra volvió a Madrid. Se sabe que reclamó su patrimonio. Este se le devolvió, sin embargo, no pudo recuperar parte de sus libros que acabaron en la Biblioteca Nacional.
José Lázaro Galdiano tenía su casa tan llena de objetos que acabó viviendo en el Hotel Ritz porque ni él mismo cabía. Falleció en 1947 con fama de “viejo huraño, arbitrario y esquivo con las gentes”.
Lázaro Galdiano tenía descendencia, pero quería más a su colección que a su propia familia. Temiendo que sus piezas se acabaran dispersando, decidió copiar al Marqués de Cerralbo y legar todo su patrimonio a todos los españoles. Se creó una fundación y, con ella, nació el Museo Lázaro Galdiano.
EL GRAN TESORO DE LÁZARO GALDIANO
La colección que reunió José Lázaro Galdiano a lo largo de toda su vida incluye un total de 12.600 piezas. Cuando el museo abrió, mucha gente se sorprendió pues nadie esperaba que lo que fue un capricho de un adinerado tuviera tantísima relevancia.
Una parte importante de todo esto es la cantidad de obras de arte que adquirió durante toda su vida. Una de sus predilecciones era la pintura española, por lo que en el museo puedes observar obras de primera calidad.
Su gran amor por Goya le llevó a adquirir uno de los cuadros más importantes del de Fuentedetodos. ‘El Aquelarre’ se puede visitar en las salas del Museo Lázaro Galdiano. Junto a él otras obras de pintores como El Greco, Murillo, Velázquez.
En lo referente a la pintura extranjera, en su colección hay cuadros, entre otros muchos, de El Bosco. También tiene una obra que hasta hace muy poco se pensaba que estaba pintada por el mismo Leonardo Da Vinci. Al final se supo que procedía de su taller.
Además de pintura, el Museo Lázaro Galdiano también guarda entre sus muros importantes colecciones de objetos. Cerámicas, monedas, armas… todo era coleccionable por este amante de la cultura.
CÓMO VISITAR EL MUSEO LÁZARO GALDIANO
El Museo Lázaro Galiano lleva instalado en Madrid desde el año 1947, a la muerte de su protagonista. Aunque su actividad se ha visto interrumpida por varias reformas, lo cierto es que es una de las grandes joyas desconocidas del Madrid del arte.
Para poder visitarlo, te tendrás que acercar a la calle Serrano número 122. Este abre todos los días de la semana excepto los lunes. El horario es de 9:30h a 15h. La entrada general vale 7€, aunque se puede visitar de manera gratuita de 14 a 15h.
Para conocer todos los detalles de cómo adquirir tu entrada o cómo beneficiarte de los descuentos que ofrecen, visita la página del Museo Lázaro Galiano.
Cuando abrió este museo en Madrid, todos quedaron sorprendidos por el gran patrimonio que custodiaba en su interior. Ojalá en tu visita salgas totalmente conquistado por la colección que con tanto amor José Lázaro Galiano cuidó más que a su propia vida.
