Quince meses después, las secuelas del estallido de la pandemia del coronavirus en nuestro país siguen siendo evidentes en la Comunidad de Madrid. Ya no solo a nivel sanitario, pues una nueva ola de contagios, la quinta, está llenando de nuevos los hospitales, sino también en el ámbito económico. La cifra de desempleados se mantiene por las nubes, y muchos madrileños siguen sufriendo los secuelas económicas surgidas a consecuencia de ello.
Según la Federación Regional de Vecinos de Madrid (FRAVM), se siguen ayudando a más de 13.000 personas con el reparto de alimentos, el 40% de ellas menores de edad. Así lo ha detallado esta organización a través de un comunicado. Aunque son datos de carácter preliminar, proceden de un estudio de ámbito estatal que se está desarrollando el grupo cooperativo Tangente en colaboración con la FRAVM, sobre el papel de las redes vecinales durante los meses que ha durado la pandemia.
Comparando estas cifras con las de hace un año, se puede apreciar que el volumen de personas que hoy recibe ayuda alimentaria de las asociaciones y redes barriales “representa menos de una tercera parte, pero aún así sigue siendo una cantidad notable“.
48 DESPENSAS ACTIVAS
Remontándonos al comienzo de la pandemia, concretamente al 31 de mayo de 2020, fueron 13.222 familias y 45.808 personas de la Comunidad de Madrid las que recibieron ayuda de 62 despensas o bancos de alimentos. Cifra que ha ido disminuyendo con el paso de lo meses, simultáneamente con el control del virus.
“Las redes vecinales, muchas de las cuales provienen o se han apoyado de colectivos de barrio ya existentes, se han convertido en un actor esencial aportando un tipo de ayuda inmediata y directa allí donde la Administración tiene dificultades para llegar”, sostiene José Luis Fernández de Casadevante, miembro del equipo de la investigación.
“LAS REDES VECINALES SON AYUDA INMEDIATA Y DIRECTA DONDE LA ADMINISTRACIÓN NO LLEGA”
Un año después, el pasado 31 de mayo, estos espacios de solidaridad barrial llegaron mensualmente a repartir alimentos y productos de primera necesidad a 3.789 familias y 13.352 personas de la capital. Lo hicieron a través de 48 despensas o bancos de alimentos solidarios que en estos momentos permanecen abiertos pero que, en su gran mayoría, cerrarán en agosto para retomar su actividad en septiembre.
MÁS DE 100.000 PERSONAS
Según las mismas fuentes, desde el primer confinamiento domiciliario de la Covid-19, en marzo de 2020, hasta el pasado 31 de mayo de 2021, 76 despensas y redes vecinales madrileñas, aportaron ayuda en alimentos y productos de primera necesidad a unas 30.000 familias y más de 100.000 personas.
Una “labor de gigante fue desarrollada gracias al trabajo voluntario de más de 6.000 personas, de las cuales el 65% son mujeres“, como han destacado desde la Fundación. Esta actividad fue reconocida hace unos meses por el Parlamento Europeo, que otorgó su Premio Ciudadano Europeo 2020 a la red Somos Tribu Vallecas.
El estudio será publicado en otoño. Hasta 58 redes vecinales madrileñas han participado, por el momento, en esta investigación. Por volumen de ayuda alimentaria, en la capital destacan las cinco despensas de Somos Tribu Vallecas (atienden a unas 2.800 personas cada mes), el Grupo de Apoyo Mutuo de la Asociación Vecinal de Aluche, (2.400 personas) y el Grupo de Apoyo Vecinal de Las Águilas (más de un millar de personas). La Despensa Solidaria de Carabanchel, Barrio que se Alimenta Solidaridad de Carabanchel Alto y la Red de Cuidados de Fuencarral-El Pardo, por su parte, ayudan a más de 700 vecinos y vecinas cada mes.
La práctica totalidad de los distritos de la capital sigue contando con redes vecinales que, “aunque en un volumen muy inferior al de hace un año y con una cobertura muy limitada, ofrecen apoyo alimentario a familias vulnerables”, ha querido señalar desde la organización.
Y es que según los datos extraídos por Tangente y la FRAVM, si se suman los datos de alimentación de las despensas de Madrid capital a los de las redes que siguen activas en otros distritos, como Alcorcón, Aranjuez, Collado Villalba, Fresnedillas de la Oliva y Torrejón de Ardoz, se obtiene un total de 4.042 familias y 14.144 personas que en estos momentos reciben ayuda de estos espacios de solidaridad vecinal en la región.