Un inadvertido carrillón goyesco suena cada día en la plaza de las Cortes de Madrid

El carrillón goyesco de Madrid es uno de esos rincones que a pesar de estar en el corazón de la ciudad pasa desapercibido para muchos madrileños. Ubicado en el edificio Plus Ultra enfrente del Congreso de los Diputados encontramos un reloj carrillón que asoma de uno de los balcones de la primera planta del edificio.

El edificio Plus Ultra es un inmueble situado en la plaza de las Cortes de Madrid cuyos orígenes se remontan a principios del siglo XX. Se trató de un encargo de Fernando Plá Peñalver, hijo del marqués de Amboage, llevado a cabo por Emilio Chinarro Matas. En el año 1915 recibió el premio del Ayuntamiento de Madrid a la casa mejor construida del momento.

Situada en parte del solar que ocupa el palacio de los duques de Medinaceli, cuenta con seis plantas y dos sótanos bajo una fachada de estilo francés. La esquina del edificio destaca por su forma curva y sus cuatro torreones que terminan de rematar la impresionante infraestructura.

En el balcón del primer piso se encuentra un carrillón que además de dar las horas en momentos puntuales el día presenta un pequeño espectáculo de figuras móviles, el único de España en el momento de su inauguración. Dicho reloj está formado por cinco figuras de la época de goya realizadas por Antonio Mingote.

UNAS FIGURAS CON MOVIMIENTOS PROPIOS

Éstas, representan al pintor Francisco de Goya junto la duquesa de Alba acompañada de un perro, el rey Carlos III, una Maja madrileña y el torero Pedro Romero. La función que apenas dura unos minutos narra una pequeña historia en la que el pintor retrata a la duquesa, que ésta a su vez balancea su pañuelo mientras su perro mueve la cabeza.

La escena la terminan de completar el torero que muestra su muleta, Carlos III que preside el grupo y saluda con la cabeza con una escopeta en su mano, y por último la maja que se mueve al compás de su abanico. Todo un espectáculo que merece la pena ver en directo.

Cada figura tiene un movimiento independiente, midiendo cada una 1’40 metros de altura y vestidas con ropajes de la época de Goya. Lo más interesante de estas figuras es que sus pasos se resuelven al ritmo de las 18 campanadas que se encuentran instaladas a los lados del reloj.

Durante la época navideña, el carrillón suena con villancicos propios del momento siendo todo un reclamo para turistas que acuden atraídos por las campanadas y la música de fondo. Además, las melodías del reloj se adaptan al momento que esté viviendo Madrid, puesto que en ocasiones suena el Réquiem de Mozart con motivo de un funeral.

El carillón fue inaugurado el 20 de diciembre de 1993 por la infanta Pilar de Borbón y desde ese día no ha dejado de sonar en la capital ningún día. La idea de crear dicho reloj fue de los propios directivos de la compañía con la finalidad de rendir homenaje a la capital madrileña, mandándose fabricar en Holanda.

El reloj que encabeza las figuras es también digno de destacar. Se trata de una esfera de 112 centímetros de diámetro con los números romanos en color dorado. Los personajes que diseñó Antonio Mingote están fabricados con resina sintética y fibra de vidrio, aunque primero se modelaron en arcilla.

Una pequeña joya de Madrid en un majestuoso edificio situado en plena capital nos trasladan al siglo XIX, con un espectáculo que sorprende a todo aquel que se topa con el primer balcón del edificio Plus Ultra. Para ver el espectáculo goyesco hay varias sesiones al día: a las 12:00, a las 15:00, a las 18:00 y a las 20:00. Además, los días 24 y 31 de diciembre funciona también a medianoche llenando de magia la plaza de las Cortes de Madrid.