La magia de Madrid también reside en sus bares y sus noches inolvidables. Ya sabes que nos llaman gatos, auténticos animales nocturnos, algo fácilmente extrapolable al carácter de la ciudad.
Incluso ahora, en plena pandemia del COVID-19 y respetando todas las normas de seguridad establecidas, la capital sigue siendo un lugar lleno de vida y con múltiples planes.
Y el mundo de la coctelería se adapta perfectamente a lo que venga, haciéndole ojitos a la hora del aperitivo y al tiempo que transcurre entre la salida del trabajo y la hora de la cena: afterwork lo llaman. Atrás quedaron los tiempos en los que su consumo era mayoritariamente noctámbulo.
Unos lo entienden como un arte, y otros como una forma de artesanía. Y, en mayor o menor medida, también como una disciplina con cierto sentido del espectáculo. Por ello, hoy te presentamos los locales que sitúan a Madrid como un referente en el mapa de la mixología.
21862 Dry Bar
Alberto Martínez fue el primero en abrir una coctelería tradicional pero con espíritu moderno en la capital madrileña. Lo hizo en el año 2012.
Su nombre tiene un doble guiño: al año en el que se construyó el edificio donde se ubica y al primer recetario de Jerry Thomas: ‘How To Mix Drinks’.
Sus recetas siguen el camino trazado por Jerry Thomas, el gran mentor de la coctelería desde 1862. Y lo que no siguen de ninguna manera -como diría la famosa canción de Don Omar- son las modas, pero sí las tradiciones.
Cuentan con cócteles servidos con máxima sencillez, pero sin renunciar a propuestas nuevas, y sin más decoración que la belleza de las copas, únicas y antiguas. Uno de los favoritos es el Mai Tai, un espectáculo que recrea fielmente la receta original.
Actualmente, se coloca en el mapa internacional como una auténtica joya de la coctelería madrileña. El año pasado su buen hacer logró que se colase por primera vez en el ránking ‘The World’s 50 Best Bars’, concretamente en el puesto 84.
Se localiza en la calle del Pez 27, en la zona de Noviciado, barrio de Malasaña.