Desde nuestra nacional Rubia Gallega hasta la Simmental alemana o la exótica carne de Wagyu. No importa cuáles sean tus preferencias en cuanto a razas, cortes o maduraciones. En esta selección de chuletones hay opciones para todos los gustos.
Además de trabajar con productos de primerísima calidad, el secreto también reside en esos toques únicos que aportan las mejores parrillas, brasas y carbones de nuestra ciudad. Fuego, carne y pasión. Suena delicioso, ¿verdad?
Estos chuletones superan las expectativas de cualquier carnívoro y dejan un recuerdo difícil de olvidar. Eso sí, es recomendable no empezar a leer este artículo con el estómago vacío, ahora entenderás por qué…
2Rocacho
Rocacho un restaurante contemporáneo pero con espíritu de asador. Si no te lo crees, compruébalo tú mismo con su sección ‘De la montaña a la brasa’. ¡Te dejará sin palabras!
Es el único local de Madrid capital que puede presumir de tener las carnes del célebre ‘El Capricho’, mítico asador leonés en Jiménez de Jamuz. En este lugar José Gordón las envejece meticulosamente, hasta el punto de haberse convertido en uno de los proveedores de carne más reconocidos del mundo.
Los chuletones de vaca de trabajo son la elección favorita de los comensales, madurados entre 30 y 90 días, con un precio de 95€/kilo. La oferta se completa con piezas como el solomillo de buey o vaca o la entraña, perfectamente preparados a la brasa y con su toque idóneo de sal gorda.
Las piezas son únicas y limitadas, por lo que merece la pena reservar antes de acudir al establecimiento. Si estás preparado para degustar sabores potentes y texturas suaves, que prácticamente se deshagan en la boca, este es tu sitio.
Date un capricho, y nunca mejor dicho, en la calle de Padre Damián 38, en Cuzco.