La Fiscalía de Madrid solicita 1.324 años de prisión para un pederasta que logró embaucar a 98 menores de edad a través de las redes sociales o de la aplicación de WhatsApp para mantener relaciones sexuales de distinta naturaleza, han informado fuentes fiscales.
En su escrito de acusación, el fiscal imputa a J A. S. hasta doce delitos distintos de pornografía infantil, abusos sexuales, ciberacoso y corrupción de menores, entre otros. El juicio se celebrará el próximo miércoles en la Audiencia Provincial de Madrid.
La Fiscalía subraya que a través de redes sociales tales como Instagram, de grupos de WhatsApp, “u otros de naturaleza semejante”, J. A. S. S. contactaba con menores de 16 años con la intención de mantener contactos sexuales de distinta naturaleza con los mismos.
En algunas ocasiones, se hacía pasar por una chica menor de edad llamada Lorena con la que los menores mantenían conversaciones de naturaleza sexual.
Una vez ganada su confianza, les enviaba fotos y vídeos de una chica menor de edad desnuda y masturbándose y a su vez, “con ánimo libidinoso”, solicitaba a los menores que le enviaran fotos y vídeos desnudos y masturbándose, “los cuales accedían a la solicitud del acusado bajo el engaño de estar hablando con una chica menor de edad”.
ENCUENTROS SEXUALES
Una vez consolidado el engaño, en algunas ocasiones buscó mantener un encuentro sexual con los menores a quienes les proponía hacer un trío con ella y con un supuesto amigo suyo “que sería el propio acusado”. De esta forma conseguía embaucarles “aprovechándose de la falta de madurez de las víctimas, todas ellas menores de 16 años”.
Más adelante, en el transcurso de dichas conversaciones el acusado pasaba a solicitarles de manera “muy insistente” que quedaran directamente con ese amigo para mantener relaciones sexuales con él si es que querían quedar con Lorena.
De esta forma lograba doblegar la voluntad de sus víctimas, “llegando incluso en algunos casos a ofrecer dinero o regalos a los menores para que accedieran a ello”. En más de una ocasión su táctica tuvo el éxito deseado ya que los menores accedieron a mantener sexo consentido con J. A. S. S.
En el transcurso de estas citas, “los menores y el acusado se masturbaban mutuamente, se hacían felaciones e incluso en algunos casos el acusado les llegaba a penetrar”.
En otras ocasiones el acusado se presentaba en redes sociales como un joven menor de edad, consiguiendo de esta manera también embaucar a algunos menores de 16 años con los que se intercambiaba mensajes de naturaleza sexual y archivos fotográficos y de vídeo en los que tanto el acusado como los menores exhibían sus genitales y se masturbaban.
A través de esta vía el acusado también les proponía quedar para mantener un encuentro sexual, en algunos casos ofreciéndoles dinero o regalos para que realizaran estas prácticas sexuales, consiguiéndolo en ocasiones en las que los menores accedían a mantener relaciones sexuales consentidas con el acusado.
En otros casos el acusado se presentaba directamente ante los menores como un hombre mayor de edad, “consiguiendo también de esta manera ganarse la confianza de los menores y mantener con ellos un intercambio de mensajes de naturaleza sexual y fotos y vídeos en los que tanto el acusado como los menores aparecían desnudos y masturbándose, proponiéndoles de manera insistente concertar un encuentro sexual, que en algunas ocasiones tenían lugar, manteniendo los menores relaciones sexuales consentidas con el acusado”.
De cara al interrogatorio de los menores la Fiscalía interesa la adopción de las medidas previstas en la Ley de Enjuiciamiento Criminal para evitar “la confrontación visual con el acusado utilizando para ello cualquier medio técnico que haga posible la práctica de esa prueba, tal como la vídeo conferencia u otro sistema similar que permita la comunicación bidireccional y simultánea de la imagen y sonido.
IMPUTACIONES
El fiscal le imputa un total de 98 delitos de utilización de menor con fines pornográficos o exhibicionistas y/o para la elaboración de pornografía infantil en su modalidad agravada de menores de 16 años, a razón de 8 ocho años de prisión por cada uno de ellos.
También se le acusa de 74 delitos de difusión de pornografía a menor de edad, razón de un año de prisión por cada uno de ellos; 25 delitos de exhibicionismo a razón de un año de prisión por cada uno de ellos; 44 delitos de ciberacoso por vía telemática a un menor de 16 años con utilización de engaño, a razón de dos años y seis meses de prisión por cada uno de ellos; y un delito de ciberacoso por vía telemática a un menor de 16 años con utilización de intimidación, a razón de dos años y seis meses de prisión.
De igual modo, se le imputan 14 delitos de ciberacoso por vía telemática a un menor de 16 años, a razón de dos años y seis meses por cada uno de ellos; 15 delitos de prostitución sobre menores de 16 años, a razón de 15 años de prisión por cada uno de ellos; y 5 delitos abusos sexuales a menor de 16 años con penetración por vía anal o bucal, a razón de doce años de prisión por cada uno de ellos.
Por último, se le acusa también de 8 delitos continuados abusos sexuales a menor de 16 años con penetración por vía anal o bucal, a razón de 15 años de prisión por cada uno de ellos; 3 delitos abusos sexuales a menor de 16 años, a razón de seis años de prisión por cada uno de ellos; 2 delitos continuados de abusos sexuales a menor de 16 años, a razón de seis años de prisión por cada uno de ellos; y un delito de corrupción de menores (tenencia o posesión de pornografía infantil), a razón de un año.