La Federación de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (FAPA) Giner de los Ríos de la Comunidad de Madrid ha decidido iniciar un procedimiento administrativo a través de una denuncia sobre el protocolo de actuación ante la aparición de casos de Covid-19 en centros educativos por su “total ineficacia.
“Solo dos semanas han transcurrido desde el comienzo de las clases, pero ha sido tiempo suficiente para evidenciar la total ineficacia de los nuevos procedimientos de control de la Covid-19 que se están aplicando en los centros educativos de nuestra Comunidad”, ha señalado la organización en un comunicado.
Así, ha indicado que actualmente los menores de 9 años conforman el grupo de edad con una mayor tasa de incidencia acumulada en la población, seguidos muy de cerca por los menores de 10-19 años y los adultos de 30-49 años. “Estos datos epidemiológicos ponen de manifiesto la especial situación de vulnerabilidad frente a la pandemia a la que, a día de hoy, están expuestos nuestros menores y sus familias”, ha expresado.
La FAPA ha criticado que no se realicen pruebas a los contactos estrechos de positivos, algo que consideran “una de las grandes carencias del protocolo”, y ha sumado la exención de las cuarentenas de aula por positivo (en Infantil y Primaria), salvo en caso de brotes establecidos por Salud Pública y el traslado al ámbito familiar del seguimiento y vigilancia de los síntomas en el alumnado.
“Todo ello a pesar de que los criterios científico-técnicos, para un correcto control de la pandemia, siguen recomendando como estrategia realizar test diagnósticos, rastreo de contactos y el aislamiento de los casos confirmados de manera simultánea y coordinada”, ha defendido.
Asimismo, los padres y madres han hecho mención al “colapso” de Salud Pública que se ha producido “causando un traspaso indebido de competencias a equipos directivos y coordinadores Covid y una ineficiente gestión de la situación epidemiológica en los centros educativos”.
“Consideramos que existe descoordinación entre las diferentes administraciones así como contradicciones entre los protocolos estatal y autonómico, que afectan de manera directa a la protección de nuestros hijos”, han apuntado.
Por ello, la Federación solicitó en agosto de 2020 la creación de una comisión de Seguimiento Covid-19 en la región, en la cual estuvieran presentes las organizaciones más representativas de la comunidad educativa y las consejerías de Sanidad y Educación. “No hubo respuesta”, ha afirmado.
CONCILIACIÓN FAMILIAR Y LABORAL
Por otro lado, han aludido a la conciliación familiar y laboral, que “sigue siendo la gran olvidada en todos estos procedimientos”.
“Han pasado casi dos años desde el inicio de la pandemia y las familias seguimos abandonadas ante la falta de herramientas habilitadas para poder garantizar el cuidado y atención de nuestros hijos e hijas, enfermos o en cuarentena”, han justificado.
Por ello, la Federación considera que las administraciones públicas están incurriendo en una “dejación de funciones “que están recayendo, directamente, en el ámbito familiar, con “las consiguientes implicaciones en el incremento de las desigualdades sociales que ello conlleva”.
“Sería importante aprender de las buenas prácticas y avanzar en los aspectos que más dificultades han presentado. Lo diremos todas las veces que sean necesarias: priorizar el interés superior del menor por encima de cualquier otro tipo de intereses”, ha concluido.
Los alumnos de la Comunidad de Madrid retomaron el 10 de enero sus clases tras Navidad con un nuevo protocolo de actuación de cuarentenas ante los casos y los contactos estrechos en las aulas, al que se suma las ya tradicionales mascarillas.
Así, los estudiantes de Educación Infantil y Primaria que han sido contacto estrecho con un positivo de Covid-19 no tienen que guardar cuarentena, independientemente de su estado de vacunación.
En cuanto a los estudiantes de más de 12 años, el profesorado y otro personal del centro que son contactos estrechos y que no estén vacunados o tengan la vacunación incompleta, realizan la cuarentena durante los 7 días posteriores al último encuentro con el caso confirmado.