Las flores y las vistas de Madrid, una combinación perfecta en un oasis alejado del caos de la ciudad. Así es el parque de La Dalieda de San Francisco ubicado en el barrio de La Latina. Un pequeño jardín de naturaleza muy poco concurrido y con una inmensa paz radiada de su vecina más próxima, la Basílica de San Francisco.
El espacio verde La Dalieda se puede encontrar en uno de los laterales de la gran basílica siendo su entrada completamente gratuita. Tras subir unos cuantos escalones comenzaremos a ver pasillos repletos de flores, siendo su máximo esplendor entre los meses de junio a septiembre puesto que nace la estrella del jardín: la dalia.
En el lugar donde se encuentra este espacio verde había antiguamente una muralla árabe. Además, según cuenta la leyenda, el propio San Francisco de Asís hizo una parada en su camino en este pequeño rincón apartado del bullicio de Madrid. La cabaña en la que se refugió durante la noche fue sustituida con el paso del tiempo por una pequeña ermita.
Esta ermita no se puede encontrar en la actualidad ya que fue destruida y en su lugar se construyó el convento de San Francisco, empleado durante un tiempo como cuartel de infantería y prisión militar. Desafortunadamente este histórico convento también fue destruido para poder alargar la calle Bailén.
En la actualidad los jardines de San Francisco El Grande cuentan con 21 variedades de rosales que muestran su mejor estampa en los meses de primavera, siendo un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza en pleno corazón de Madrid. Para poder disfrutar de las impresionantes vistas de la ciudad, el parque cuenta con una zona llamada “Las Visitillas”, puesto que es la zona más alta del Madrid de los Austria desde donde observar la capital en todo su esplendor.
FIGURA DE SAN ISIDORO LABRADOR
La figura de San Isidoro Labrador preside el romántico lugar, ya que es representado con un ángel que posa su mano sobre la cabeza del patrono. Aunque parezca mentira, el jardín estuvo durante un tiempo abandonado, hasta que en el año 2007 el Ayuntamiento de Madrid decidió acondicionarlo para el público y exhibir la composición de plantaciones que caracterizan al parque.
El parque ocupa un total de 600 metros cuadrados y su inauguración sirvió para recuperar la figura de la Dalieda, haciendo referencia a un antiguo jardín situado en el Parque del Matadero que fue destruido durante la ampliación de la M-30. En los laterales del jardín hay bancos para poder disfrutar con tranquilidad de los atardeceres de la capital en una zona privilegiada que pocos madrileños conocen.