La figura de Nebrija se guardará para siempre en la Caja de las Letras del Instituto de Cervantes tras el acto de homenaje realizado esta misma mañana en el municipio madrileño de Alcalá de Henares.
En el evento han participado importantes personajes públicos como el alcalde la localidad, Javier Rodríguez Palacios, el director de la institución, Luis García Montero, el alcalde de Lebrija, José Benito Barroso; el académico de la Real Academia Española, Juan Gil Fernández; y la vicerrectora de Políticas de Responsabilidad Social y Extensión Universitaria de la Universidad de Alcalá, María Jesús Such.
“Reivindicamos la figura de Antonio de Nebrija. En Alcalá de Henares hemos recogido tierra junto a la Universidad, donde pueden reposar los restos de Nebrija. Es un legado que va a quedar para la eternidad. Se trata de una persona que nació en Andalucía, que vio y vivió los acentos diferentes de un idioma enriquecido con distintas diferencias y acentos” ha afirmado Javier Rodríguez Palacios.
La Caja de las Letras se ha abierto para guardar el recuerdo del autor de la primera gramática de la lengua castellana, publicada en 1492, que perdurará en la caja de seguridad número 1708 de la antigua cámara acorazada del Instituto. Como testigos al emotivo homenaje han acudido la directora general del Libro y Fomento de la Lectura, María José Gálvez, en representación del Ministerio de Cultura, y el presidente de la Comisión Interadministrativa del V Centenario del fallecimiento de Elio Antonio de Nebrija, José Muñiz Fernández. También ha participado la tercera teniente de alcalde y concejala de Cultura del Ayuntamiento de Alcalá de Henares, María Aranguren.
Nebrija fue catedrático de la Universidad de Alcalá y como tal, tras su fallecimiento, sus restos descansarían en la Capilla de San Ildefonso, en una zona próxima al sepulcro del Cardenal Cisneros, reservada a quienes eran profesores de la Universidad de Alcalá. Sin duda alguna, marcó nuestra historia e identidad teniendo una estrecha relación con la Universidad de Alcalá de Henares.
Tras el depósito de legado, Juan Gil Fernández, académico de la RAE, ha mencionado cómo Nebrija sentó las bases de la ortografía castellana “al proclamar que hay que escribir como se habla y hablar como se escribe, convencido de que las letras se deben distinguir no por su escritura sino por su sonido”. Por su parte, Rodríguez Palacios ha terminado el acto de conmemoración afirmando que “aquí estamos instituciones como la Universidad de Alcalá, el Instituto Cervantes, y los Ayuntamientos de Lebrija y Alcalá, que nos esforzamos en una gran misión: mantener vivo una lengua que está viva, que tiene mucho futuro, y que sirve para unirnos.”