Madrid sigue apostando por fomentar sus espacios verdes. No es de extrañar que una de las capitales con mayor población del mundo necesite entornos naturales donde poder desconectar del bullicio del centro de la ciudad. Hace apenas dos años, en mayo del 2020, el Ayuntamiento de Madrid lanzó un concurso de proyectos para la elaboración del Bosque Metropolitano, un cinturón forestal que pretendía luchar contra el cambio climático.
Con el paso del tiempo, este proyecto se ha hecho realidad y se han inaugurado las primeras hectáreas de este gigantesco pulmón verde. Más de 6.000 árboles y cerca de 39.000 especies arbustivas nacerán en esta parte del entorno en la que ya pueden disfrutar los madrileños.
Situado en la zona de Aravaca y con un espacio de 16,1 hectáreas ha servido de aperitivo para poder conocer como será una de las mayores infraestructuras verdes de todo el continente. Todo aquel que se quiera acercar a conocer una pequeña parte del Bosque Metropolitano deberán dirigirse al número 3 de la calle América o el número 1 de la Avenida del Talgo.
“Plantamos para que lo disfruten las próximas generaciones. Por eso es importante la presencia aquí de todos los grupos políticos, que garantizan la continuidad de este bosque”, afirmó ayer la vicealcaldesa del Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, en la inauguración y apertura del Bosque Metropolitano. Junto a ella, acudieron al acto de presentación la concejala del distrito, Loreto Sordo, y los portavoces de los distintos grupos políticos. Además, han estado presentes los equipos de los proyectos ganadores del concurso de ideas para el Bosque Metropolitano y un grupo de alumnos de la UPM interesados en el proyecto que han recibido una explicación del mismo por parte de los técnicos municipales.
La creación del Bosque Metropolitano forma parte de los Acuerdos de Villa y tiene como finalidad principal conectar la zona norte de la Comunidad de Madrid con el sur de la misma, además de fomentar el reequilibrio medioambiental de la zona. Desde que se arrancaron las obras se han invertido 26 millones de euros y se han plantado 10.300 árboles y 118.000 ejemplares arbustivos.
UN ESPACIO NATURAL PARA EL DISFRUTE DE LAS NUEVAS GENERACIONES
Aunque es cierto que el anillo natural que recorrerá Madrid empieza a dar sus frutos, tendremos que esperar una década para ver el espacio verde terminado. Estas dos primeras parcelas abiertas al público se encuentran en Moncloa-Aravaca y en Campo de las Naciones en Barajas. “Esto permitirá que la ciudad crezca con la naturaleza para reforzar un ecosistema que está dañado”, afirmaba este lunes la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, durante el acto de inauguración.
Pinos, enebros, madroños y encinas. Todos estos árboles que destacan por su lento crecimiento indican que el nuevo bosque madrileño requerirá de paciencia y tiempo para verlo en su completo esplendor. Por ello, se trata de un proyecto del que podrán disfrutar sobre todo las nuevas generaciones, tal y como lo confirmaba la vicealcaldesa al indicar que “se planta con la aspiración de que lo puedan disfrutar nuestros hijos y nietos”.
La próxima construcción en esta zona empezará en el próximo mes de mayo con la construcción de una nueva pista de atletismo integrada completamente en la naturaleza que contará con ocho carriles y una zona especializada para la práctica de 100 metros lisos. Además, el Bosque Metropolitano contará con carriles para las bicicletas y rutas para pasear y hacer deporte en un entorno que se extenderá a lo largo de 75 kilómetros en la ciudad de Madrid.