La Policía Municipal de Madrid desalojó el sábado por la noche una fiesta ilegal que se estaba desarrollando en un local del distrito de Tetuán sin permisos, ninguna medida de seguridad y riegos de derrumbe, ha informado una portavoz del Cuerpo Local.
La intervención tuvo lugar el día 2 a las 23:12 horas en un establecimiento de la calle Naranjo tras el aviso de varios vecinos que apuntaban que en ese sitio la música estaba muy alta y la gente gritaba mucho. Al llegar, los agentes comprobaron que el portero carecía del carné profesional de controlador de acceso.
Luego apareció el encargado, que alegó que estaban realizando una actividad cultural consistente en una exposición fotográfica privada. Sin embargo, no pudo mostrar ningún listado de invitados, pero sí había tickets con los precios de la entrada y los precios de las bebidas alcohólicas y refrescos que dispensaban.
A continuación, los policías inspeccionaron el local, pese a la oposición del encargado y varios trabajadores, por lo que pidieron refuerzos. Comprobaron que era una fiesta ilegal en una sala pequeña con una barra donde expedían las bebidas mientras que una persona pinchaba música a todo volumen. En su interior había 93 personas.
El establecimiento carecía de extintores, señalización ni otras medidas de seguridad básica. El encargado reconoció entonces que no tenía ningún tipo de autorización. Además, cuando encendieron la luz de la sala, los agentes comprobaron que las paredes presentan grandes abombamientos, fracturas y muchísimas humedades.
Por ello, avisaron a los Bomberos del Ayuntamiento, que comprobaron las deficiencias, realizaron un saneamiento preventivo de las paredes y decretaron peligro de colapso inminente, por lo que precintaron el local, que tendrá que ser inspeccionados por técnicos del distrito. Los responsables del mismo serán fuertemente sancionados.