El gazpacho es uno de los reyes de nuestra gastronomía de verano y no es difícil adivinar por qué: ingredientes mediterráneos de temporada, en su punto, como los tomates y los pimientos, el frescor que lo acompaña tanto si se toma como sopa o como bebida, su poder saciante y sus características nutricionales.
La verdad es que deberíamos usar más el gazpacho como refresco en lugar de otras bebidas azucaradas porque son muchas las ventajas: el gazpacho sale mucho más barato, lo podemos hacer con ingredientes al gusto, refresca, hidrata y sacia y lo podemos llevar a donde queramos, exactamente igual que haríamos con una botella de agua, de té o de refresco.
2GAZPACHO DE ALBARICOQUE
Aprovecha que estamos en temporada de frutos de hueso como el albaricoque para hacer un gazpacho fresquito muy afrutado. Es igual de fácil que los demás, pero cambiando tomates y cebollas por albaricoques (sin hueso). En lugar de pimiento verde, utiliza pimiento amarillo o pimientos snack variados, que son dulzones.
Omite el ajo y en su lugar pon unas hojas de menta. Bátelo todo hasta que quede un gazpacho cremoso. Pruébalo y, si quieres, añade unos hielos al servir. Puedes hacer este mismo gazpacho con melocotones, nectarinas, paraguayos o ciruelas.