La comedia más tentadora de Oscar Wilde llega al Teatro Lara

Oscar Wilde vuelve al Teatro Lara este verano y lo hace con la primera obra que escribió el autor inglés, un texto que afiló las críticas de la época en una versión libre de Ramón Paso, que también dirige el montaje bajo el nombre de ‘El abanico de lady Windermere’.

Se trata de la comedia más tentadora de Wilde estrenada en 1892, y con la que inició su producción teatral. Es una crítica burlona sobre la falsa moral, el puritanismo y lo políticamente correcto y su acción se desarrolla a través de un enredo familiar donde nadie es lo que parece ser, según recoge el Teatro en un comunicado.

Paso actualiza la esencia de Wilde con un montaje moderno y atrevido de la misma compañía que ya recuperó en una versión actualizada ‘La importancia de llamarse Ernesto’.

En esta ocasión, Ramón Paso dirige para su versión de este abanico a Ana Azorín, Inés Kerzan, Ángela Peirat, Eduard Alejandre, Jordi Millán, Guillermo López-Acosta, Mila Villalba y Mireia Zalve. Se podrá disfrutar en la Sala Cándido Lara hasta el 27 de octubre los jueves, viernes y sábados a las 22.30 horas.

“Margaret Windermere, una dama intachable, tiene motivos para creer que su marido le es infiel. En el día de su cumpleaños, recibe como regalo de su esposo un abanico, aunque también podría ser de Molly Erlynne. Airada por la conducta de su esposo, Lady Windermere se deja seducir por un donjuán que la persigue desde hace tiempo. Pero, lo cierto es que no hay que fiarse de las apariencias, porque siempre resultan adorablemente engañosas”, han relatado.

UNA OBRA CON GRAN RECORRIDO EN MADRID

Esta obra ha tenido un largo recorrido por la historia del teatro de España, ya que se estrenó en España en el Teatro de la Princesa de Madrid en 1920, a cargo de la compañía de María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza.

La pieza se repuso en 1929 en el Teatro Centro de Madrid por la compañía de Lola Membrives (que da nombre a la sala pequeña del Teatro Lara), en 1931, se volvió a representar, esta vez en el Teatro Español, con Ana Adamuz y María Guerrero López. Finalmente, en 1992 se estrenó una versión libre de Ana Diosdado con el título de ‘La importancia de llamarse Wilde’.