Madrid se ha convertido, no sólo en una de las ciudades favoritas de todos los turistas nacionales e internacionales, sino también en una de las ciudades más utilizadas en el mundo del cine. Algo que el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, ha buscado fortalecer tras la pandemia del coronavirus, con medidas de apoyo a las grabaciones cinematográficas en las calles de Madrid. Un proyecto que, sin embargo, está comenzando a cansar a los vecinos de algunos barrios de Madrid, como es el caso de Malasaña, que ha perdido gran parte de su vida cotidiana debido a los constantes rodajes.
Sin duda, la capital española es una ciudad que atrae miradas. Tanto turistas nacionales como internacionales visitan anualmente Madrid para quedar sorprendidos con los choques artísticos, históricos y culturales que se viven en el día a día de la ciudad, en la que los grandes edificios históricos se encuentran rodeados por pequeñas calles en las que el arte parece inundarlo todo.
Ciudad de gran diversidad que no solo conquista a los turistas, sino también al mundo del cine. Y es que cada vez son más las producciones cinematográficas que buscan escenarios por las calles de Madrid. Algo que, sin duda, no hace más que aumentar la fama de la capital española como “ciudad de Cine” a nivel internacional.
EL PLAN DE CINE DE ALMEIDA EN MADRID
Una realidad que no ha pasado desapercibida en el Ayuntamiento de Madrid. En concreto, para José Luis Martínez-Almeida. Y es que el edil popular no ha dudado en utilizar las muchas oportunidades cinematográficas que ofrece la capital para hacer, una vez más, promoción de la ciudad, tanto a nivel nacional como internacional.
Así pues, tras los peores momentos de la pandemia del Covid-19, y ya entrados en el 2022, el edil de Madrid destacaba que se encontraba preparando, junto a su equipo del Ayuntamiento, una nueva ordenanza de rodajes para Madrid. Una normativa que no sólo regularía la actividad audiovisual de la capital, sino que también fomentaría la fama de Madrid como un “plató de rodajes”.
“Es uno de los diez destinos favoritos del mundo para la industria audiovisual, y el número tres a nivel europeo” aseguraba el alcalde madrileño, en declaraciones recogidas por La Razón. Algo que Almeida busca destacar, con esta nueva ordenanza, que ofrece descuentos y ventajas en las producciones de cine para fomentar estas actividades en las calles madrileñas.
LOS VECINOS DE MALASAÑA, HARTOS
Sin embargo, parece que no todo son ventajas en este “Madrid de Cine” diseñado desde el Ayuntamiento de Madrid. Y es que, a pesar de que el edil popular aseguraba que se buscaría un equilibrio entre las grabaciones cinematográficas y la vida de los madrileños en sus barrios, lo cierto es que estos últimos parecen estar agotados de estar “entre cámaras”.
Es el caso de los vecinos del conocido y ya histórico barrio de Malasaña de Madrid. Un lugar que no sólo es ya apreciado por los madrileños, sino también ahora por los productores de cine y series nacionales e internacionales.
Tanto, que la vida en el barrio se ha convertido en un verdadero “infierno” para muchos de sus vecinos, que no han dudado en lanzarse a las redes sociales para criticar que, una vez más, el descanso y la vida de los vecinos queda relegada a un segundo plano en la capital española.
“Hasta las narices de tantas grabaciones” destacaba una vecina del barrio en las redes sociales. “Sin aparcamientos libres, calles cortadas, coches que se los lleva la grúa porque no siempre avisan con el tiempo suficiente… Es una auténtica vergüenza que día sí, día también, tengamos que tener esta situación los vecinos”. “Es una pesadilla que no acaba. Todas las semanas igual” lamenta otro.
Quejas que se unen a las críticas contra el Ayuntamiento de Madrid por la permisividad con las terrazas de la hostelería. Una situación de “invasión” de las calles de los barrios madrileños que, tal y como lamentan los vecinos, están convirtiendo a Madrid en una ciudad de cine… pero inviable como hogar para miles de madrileños.