Los trabajadores del Hospital La Paz continúan sin saber cuándo se trasladarán al Hospital público Isabel Zendal por motivo de la reforma de la línea 10 del Metro. El Ayuntamiento de Madrid presume de la buena gestión de estas obras y de que no se frenará la actividad en los hospitales. Sin embargo, la mayor parte de los médicos del centro desconocen como realizarán los traslados de un hospital a otro.
La Comunidad de Madrid ha comenzado las obras de modernización integral y de acceso a los hospitales de La Paz y el Ramón y Cajal. Este proyecto coincide con la remodelación del hospital de la Paz, uno de los más ambiciosos en el ámbito sanitario madrileño. Según el Ayuntamiento de Madrid, la actividad asistencial no se detendrá en el centro.
A pesar de que el objetivo de esta modernización es, fundamentalmente, favorecer el acceso de usuarios, se han olvidado de la parte más importante: los trabajadores del centro. Los médicos y enfermeros del Hospital La Paz desconocen aún cómo y cuándo se trasladarán al Hospital Zendal. Además, su desconcierto nace en que no sé sabe el proceso que se llevará a cabo para trasladar los pacientes de un centro a otro.
Los médicos y enfermeros de La Paz se sienten “abandonados” y “desinformados” ante esta situación. De hecho, La Paz realiza cada año más de un millón de consultas y presta atención sanitaria a aproximadamente 230.000 pacientes en Urgencias y Zona norte de Madrid. No tener una organización previa ni disponer de los medios fáciles para poder trasladarte e intervenir a un paciente resulta complicado. Esto se vuelve más difícil si se tienen que mover a otro centro médico y paciente. Este es un hecho que ahora mismo se está viviendo entre los trabajadores del hospital La Paz.
Una de las alumnas en prácticas en el hospital La Paz cuenta para el Diario Qué “nadie está enterado de nada en el centro”. “Mucha gente ni siquiera sabe que se han iniciado las obras de reforma en el Metro”. Además, ha explicado que “el año pasado nos dijeron que iban a cambiar planta por planta. Es decir, nos trasladarían a otra planta cuando en la que solemos trabajar estuviese en obras, pero nada más”.
En cuanto a los traslados desde el propio centro hasta el Hospital Zendal “sobre movernos al Zendal no nos han dicho nada. Es más, nos dijeron que esta situación iba a suceder en bastante tiempo”.
Este hecho resulta paradójico ya que el objetivo del Ayuntamiento de Madrid con estas obras es asegurar que se cumplan las necesidades de las personas que quieran acceder a La Paz a través del metro. También a través del ramal de acceso desde la M-30. Sin embargo, que ni los propios trabajadores estén avisados es un hecho que crea desconfianza en las promesas de la alcaldía de Madrid.
EL RAMAL DE ACCESO A URGENCIAS FALLIDO
El nuevo intercambiador de Valdebebas y la prolongación de la línea 11 de Metro darán cobertura a la zona del Hospital Isabel Zendal. Sin embargo, el ramal de acceso al Servicio de Urgencias desde Madrid Calle 30 crea más atascos de los que consigue evitar. El Ayuntamiento de Madrid lo ha incluido en su plan de remodelación para aquellos vehículos que procedan del este del Nudo Norte. El objetivo está en reducir el tiempo de llegada para pacientes críticos y situaciones de emergencia. Este ramal aún no se ha comprobado si tiene la efectividad que buscaba la alcaldía de Madrid.
“De momento entramos al centro de forma normal, por la puerta principal hasta nuestra planta correspondiente” ha afirmado la alumna en prácticas del hospital La Paz. “Nadie sabía que iban a hacer las obras en el metro. En un principio sabíamos que iban a poner ascensores en la puerta de Urgencias, que es lo que está en obras ahora mismo. Esto es lo único que sabíamos”, ha confirmado.
El Ayuntamiento de Madrid presume de estas obras de remodelación en las que se han invertido un total de 332 millones de euros. Sin embargo, se han olvidado de que más gente necesita acceso fácil y traslado de La Paz al Zendal: los médicos.
Esto pone en jaque una vez más la gestión del Ayuntamiento de Madrid sobre la remodelación del metro, ya que, se ha preocupado más de anunciar las obras que de informar a sus propios trabajadores como va cambiar su día a día con estas reformas.