Los socialistas apuntan en la “operación ministro” a Fernando Grande-Marlaska

El responsable de Interior, Fernando Grande-Marlaska, es uno de los candidatos a la presidencia del PSOE-M. A pesar de que la decisión se guarda de puertas para dentro, Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ya ha puesto encima de la mesa los nombres de los posibles aspirantes.

Los altos cargos socialistas se preparan para dar el nombre del posible candidato del PSOE en Madrid. Sin embargo, será el día de la Almudena cuando se conozca el nombre del afortunado. El hermetismo se ha instalado en la sede nacional y regional. Horas de espera que dejan entrever dudas pero también descartes a la hora de quien será el elegido.

Encima de la mesa del presidente, Pedro Sánchez, según fuentes socialistas, siempre han estado dos nombres. Estos se corresponden con el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y el del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

En un primer momento, Bolaños cumplía con los requisitos necesarios para el puesto: grado de conocimiento entre el electorado, perfil institucional y perfil orgánico en el partido. Sin embargo, la sorpresa de su autoexclusión ha dado una pista de sus reparos a aceptar el encargo.

Por ello se encuentra en el punto de mira Fernando Grande-Marlaska, el juez en excedencia y sin carné del PSOE. No tiene el requisito del predicamento orgánico de Bolaños, pero en su favor cuenta con un alto grado de aceptación en el electorado moderado de centro, lo que le ayudaría a arañar votos de la caída de Ciudadanos.

VOTOS A FAVOR PARA MARLASKA

La irrupción de Marlaska en el escenario madrileño podría ser interpretado como “un guiño al colectivo LGTBI” en un momento de máxima tensión por la demora en la tramitación de la ley trans. A esto se suma la baja del partido de la diputada trans Carla Antonelli.

Según estos hechos, es “el tapado” en la carrera por Madrid, y el único ministro que no mandó un mensaje de ánimo a la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, la elegida inicialmente por Sánchez para ser candidata por Madrid.

González ha visto con tristeza como se han desvanecido sus opciones y su apadrinamiento por parte de Moncloa y de Ferraz, pero ha encajado el golpe con tanta discreción como desánimo.

La decisión está tomada y el anuncio del próximo candidato en manos del presidente. Según las fuentes consultadas, “sólo lo saben tres personas”, entre las que se encuentran Pedro Sánchez y el secretario de los socialistas madrileños, Juan Lobato, que se ha convertido en uno de los secretos mejor guardados de Sánchez que desconocían hasta sus más cercanos.

EL PSOE BUSCA “EVITAR ERRORES DEL PASADO”

El propio Juan Lobato ha ido deslizando un cuadro de características en el que ha dejado entrever que el equipo que dirige busca evitar errores del pasado. Esto recuerda al caso del ex entrenador de baloncesto Pepu Hernández, el esperado caso fallido en 2019, que acabó yéndose del consistorio en septiembre de 2021. Hernández fue una elección a dedo y personalísima de Sánchez, confirmando descartes previos entre los que se encontraba Alfredo Pérez Rubalcaba.

El ex técnico firmó el peor resultado de la historia del PSOE en la capital: un 13,75% de los votos, ocho ediles (de un total de 57), cuarta fuerza política, por detrás de Más Madrid, PP y Ciudadanos. Hay que hacer hincapié en que el PSOE de Lobato tiene como principal objetivo lograr gobernar en el Ayuntamiento de Madrid, al que no han conseguido acceder desde 1989.

Por esta razón, el PSOE quiere elegir con el máximo criterio al próximo candidato para Madrid. Fernando Grande-Marlaska se convierte así en un antaño fichaje estrella de Sánchez para su primer Gobierno. Ahora, el responsable de Interior se erige en el fiel escudero que se encamina a inmolarse en Madrid.