La A-5, su soterramiento, es uno de los dolores de cabeza del alcalde José Luis Martínez-Almeida y su delegado de Movilidad y Medio Ambiente, Borja Carabante. Una promesa electoral incumplida y ni siquiera arrancada en esta legislatura. La solución del equipo de Carmena fue poner semáforos, lo que aumento la contaminación. Pero más allá del juego político, está la vida cotidiana de decenas de miles de vecinos afectados por el hecho de convivir con una auténtica autopista, la que da acceso precisamente al corazón de Madrid.
Las Asociaciones Vecinales de Campamento y Colonia Lourdes junto con el resto de agrupaciones llevan pidiendo soluciones para la A-5 más de 30 años. Ahora continúan a la espera de un programa electoral que contemple sus peticiones “por motivos de salud” mientras conviven con una carretera que los “está machacando”.
En el distrito de la Latina finaliza otra legislatura y continúan observando atónitos como el Ayuntamiento continúa sin poner solución a su problema con el Paseo de Extremadura. Las viviendas de la zona de la A-5 se exponen al paso de un mínimo de 130.000 vehículos diarios. Estos resultados han sido comunicados a Borja Carabante, delegado Área de Gobierno Medio Ambiente y Movilidad Ayuntamiento de Madrid, con el que, según explica Andrés Piñeiro, presidente de la Asociación Vecinal de Campamento, “nos hemos reunido hasta en 5 ocasiones para poder solución estas carreteras”.
A pesar de considerarse una vía urbana, la velocidad máxima en esta vía es de 60 kilómetros por hora. la consecuencia, las molestias de contaminación atmosférica, lumínica y acústica. Además, los residentes en la zona denuncian las carencias en el cuidado de los pasos subterráneos para peatones. Los vecinos acumulan 30 años de reivindicaciones con el soterramiento de la vía como la principal forma de poner fin a las molestias que les genera y que minimizan su calidad de vida.
“Se trata de un problema que afecta a la salud de los vecinos y se compararía con la Ley Antitabaco. Las Administraciones Públicas y el Ayuntamiento tiene que tener en cuenta el derecho a la salud de las personas y esos 130.000 coches están matando a la gente“. Así ha explicado Andrés Piñeiro, presidente de la Asociación Vecinal Campamento, la situación de contaminación en la que viven.
A pesar de que no se cuenta con una estación de medición en la zona de la A-5, desde la asociación están convencidos de que los niveles pueden estar entre los más altos de la ciudad, además de que ya se han registrado “por la Universidad Politécnica unos niveles de dióxido de nitrógeno por encima de lo permitido”, ha insistido Piñeiro.
EL SOTERRAMIENTO DE LA A-5: “QUEREMOS UNA SOLUCIÓN, PERO DEPENDERÁ DEL MODELO DE CIUDAD QUIERAN IMPLANTAR”
Más Madrid ha hecho público recientemente que tiene como prioridad en su agenda llevar a cabo cambios en la A-5 para tener en cuenta a los vecinos que están sufriendo estas situaciones. Marcos Payo, que gestiona el perfil que sigue el soterramiento de la A-5 en Twitter y pertenece a la plataforma que lo reivindica, explica que los planes de Más Madrid no se “adecuan a las peticiones de los vecinos”.
Tal y como han explicado desde la formación, los planes de Más Madrid para la A-5 se centra en quitar 1-2 carriles por sentido, dejando 4 o 5 en total, instalar semáforos y pasos de peatones dando lugar a un túnel de dos carriles, destinado exclusivamente para autobuses. En cuanto a la superficie proporcionarán un autobús rápido para recorrer el Paseo de Extremadura entero.
En este sentido, Marcos Payo ha explicado que “entre la disyuntiva entre tener una continuación de la Avenida de Portugal (un carril por sentido) o una Avenida de la Ilustración, los vecinos optan por la tranquilidad, el silencio y la ausencia de contaminación visual”. Por ello, para Payo “todas las ventajas que tiene la propuesta de Más Madrid las tiene, incrementadas, el soterramiento. Más Madrid es consciente de que su propuesta no es la preferida y por eso en sus declaraciones aclaran frases como “soterrar gran parte del tráfico” refiriéndose exclusivamente a los autobuses”.
SOTERRAMIENTO DE LA A-5: “APUESTA POR EL TRANSPORTE O EL COCHE”
Por otra parte, Andrés Piñeiro, presidente de la Asociación Vecinal Campamento, tiene claro que están ante “una carretera que nos está machacando”. Por ello, quieren “una solución cuanto antes, pero deben pensar desde el Ayuntamiento qué modelo de ciudad quieren antes de implantar las medidas”.
Además, Piñeiro ha querido hacer hincapié en “la forma de transporte que más quiere poner en valor el Ayuntamiento: si apostar por el transporte público o animar al uso del coche para hacer unos cambios u otros en cuanto a la A-5″. En este sentido pone de ejemplo Madrid Río, el que considera “un animador para que no se use el coche”.
Hay que tener en cuenta, tal y como explica Rocío, la presidenta de la Asociación de Colonia Lourdes, que hace cuatro años el Ayuntamiento recogió “como estrella en su campaña electoral y tenía pensado hacerlo en su legislatura, pero no olvidamos que este proyecto se aprobó en el Pleno del Ayuntamiento en la era de Gallardón y que se paralizó en 2005 por falta de recursos”.
En este sentido, el soterramiento de la A-5 es un centro de polémica que aún sigue sin cumplirse. Tal y como explica Rocío, “hay un proyecto aprobado en pleno que también se ha incumplido su consecución y ejecución”. Por ello, ahora los vecinos y las distintas asociaciones continúan velando por su seguridad y por su salud hasta los resultados de las elecciones de mayo.