La vejez es una etapa de la vida que requiere de un mayor control de la salud.
Es natural que al llegar a una edad avanzada las personas tengan dificultades físicas y psíquicas que exigen un abordaje mucho más frecuente e integral. Por este motivo, los familiares de adultos mayores que padecen alguna enfermedad o discapacidad, deciden buscar un lugar que pueda ayudarlos.
Las residencias de ancianos en Madrid de Amavir se presentan como una alternativa ante esta realidad. El servicio de la compañía se centra en pensar y diseñar espacios cálidos que facilitan el cuidado de las personas mayores en función de sus necesidades.
La metodología de trabajo en las residencias de Amavir
El desafío de decidir cuál es el mejor lugar para alojar de forma permanente o temporal a una persona de edad avanzada en una residencia es muy complejo. La familia necesita certificar que el establecimiento cumpla con todas sus expectativas; siendo las más relevantes el buen trato, el equipo médico y la variedad de actividades que desarrollan.
En este sentido, quienes trabajan en una residencia para mayores Amavir se ocupan de elaborar un plan de atención individual con el fin de mejorar la experiencia del adulto en el lugar y también con la intención de generar tranquilidad en la familia.
A su vez, este tipo de residencias cuentan con profesionales de la medicina especializados en geriatría para proveer una cobertura continua y específica. El personal médico lleva a cabo un seguimiento personalizado de cada uno de los residentes (hecho que también provoca buenas sensaciones en el grupo familiar y en ellos mismos).
Estrategias para cuidar y mejorar la salud mental, con Amavir
Teniendo en cuenta que la depresión es uno de los problemas de salud mental más importantes del presente, las residencias de ancianos de Amavir impulsan proyectos para potenciar las capacidades cognitivas de sus integrantes. Mediante una programación diaria de actividades, la empresa busca ralentizar el deterioro de la psiquis. A través de fiestas, celebraciones, juegos lúdicos, cine, teatro y actuaciones musicales, los adultos mayores consiguen fortalecer su estado emocional. Se trata de animaciones socioculturales que se realizan dentro de las residencias.
Siguiendo con esta misma línea de trabajo, la compañía estimula la caminata para combatir el estrés y la tristeza. El envejecimiento activo es la clave. Es por ello que organizan excursiones, visitas y paseos que ayudan a despejar la cabeza. Las animaciones socioculturales de exterior son una herramienta clave para combatir las patologías que afectan la mente.
Las terapias alternativas, como la musicoterapia, la estimulación sensorial y los talleres de cocina, son también estrategias esenciales que sacan al adulto mayor de su zona de confort, dejándole en claro que sobran los motivos para sonreír y ser feliz.
Por sus actividades de interior y exterior, el trato personalizado y sus 25 años de experiencia, las residencias de Amavir en Madrid son una opción ideal para las personas de la tercera edad.