La Sanidad pública en la Comunidad de Madrid parece haberse convertido en un auténtico desafío para el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso a pocas semanas de las elecciones regionales. Y es que Sanidad sigue acumulando pacientes en lista de espera, mientras se suceden las huelgas de los sanitarios en busca de mejorar sus condiciones laborales. Un contexto en el que la Comunidad de Madrid parece haber encontrado un “pequeño respiro” para la administración sanitaria en cerca de 60 pacientes de VIH.
Durante los peores momentos de la pandemia del Covid-19, la sanidad pública española se convirtió en el gran protagonista del coronavirus. Y es que, ante los complicados momentos de crisis sanitaria que se estaban viviendo en el país, todos los ciudadanos españoles no dudaban en aplaudir, desde sus balcones, la incansable labor de los sanitarios, que arriesgaban su vida diariamente frente al desconocido virus.
Una pandemia que parecía que llevaría a un cambio dentro de la administración pública de la Sanidad española. Sin embargo, ese cambio parece no haberse producido, llevando a los profesionales de la salud a organizar huelgas en busca de una mejora de sus condiciones laborales. Huelgas que están afectando especialmente al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, brutalmente señalada y criticada por los sindicatos y muchos de los trabajadores del sector sanitario madrileño.
Sin embargo, parece que la situación crítica de la sanidad madrileña no se debe únicamente al Covid-19 ni a sus consecuencias. Y es que las largas listas de espera se siguen sucediendo, a la vez que las huelgas de los sanitarios parecen complicar cada vez más el “embudo” de asistencia sanitaria que se está viviendo en los centros de salud y hospitales de la región madrileña.
LA “SOLUCIÓN” PARA EL ATASCO EN LA SANIDAD PÚBLICA
Así pues, las últimas cifras conocidas destacan que un total de 856.580 madrileños estaban en lista de espera a final del mes de febrero para ver al especialista, someterse una operación, o realizarse una prueba diagnóstica. Una cifra que supone un incremento del 38% con respecto a 2019, poco antes de iniciarse la pandemia del coronavirus en el país, y un 5,19% más que en el último año.
Cifras que parecen demostrar que la Sanidad pública madrileña cada vez está más colapsada, siendo necesaria una solución inmediata a las largas listas de espera, y a la casi imposible misión de conseguir una cita médica.
Soluciones que parecen no llegar. Al menos, en cuantía suficiente para aligerar las salas de espera de los centros médicos. Y es que una de las propuestas recientemente presentadas por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid parece afectar sólo a 61 pacientes de la Sanidad pública madrileña. Una cifra exageradamente insuficiente ante el colapso sanitario de la región.
Así pues, la Consejería de Sanidad, junto al Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid han puesto en marcha un proyecto piloto para que un total de 61 pacientes de VIH puedan recoger su medicación en las farmacias más cercanas a sus domicilios, sin tener que acudir, como hasta ahora, al hospital.
Un plan que, sin duda, puede beneficiar enormemente a estos pacientes, y que podría ser un primer paso de la Comunidad de Madrid para desatascar la colapsada Sanidad madrileña. Y es que muchos pacientes que acuden a los centros de salud en busca de sus recetas médicas han asegurado a este diario que sería mucho más sencillo, y más práctico a la hora de gestionar la sanidad pública, que los medicamentos fuesen recetados de forma directa a los pacientes, evitando así visitas innecesarias que, sin duda, sólo complican la ya extenuante situación de los sanitarios en Madrid.
