Colectivos ciudadanos han convocado una nueva manifestación contra la tala de árboles que está prevista por las obras de ampliación de la Línea 11 de Metro. Además, en Getafe, se ha alertado de otra tala a la ribera del Manzanares de la cual los vecinos ya han puesto en aviso a la Policía Local del municipio, a los agentes forestales y al Seprona.
Parece ser que la tala de árboles no cesa en la capital a pesar de que ese haya dado una tregua en esta época de elecciones y se haya silenciado este tema. Ahora una nueva concentración vecinal se ha llevado a cabo este jueves en Arganzuela, donde los ciudadanos han manifestado su rechazo contundente a la tala de más de 600 árboles debido a las obras de ampliación de la Línea 11 de Metro en el parque de Comillas y Madrid Río, así como en otros espacios verdes de la zona.
La manifestación se centró, según las quejas de los vecinos, en apoyar la expansión del sistema de transporte público, pero teniendo en cuenta detener la idea de talar los árboles considerados fundamentales para el equilibrio del ecosistema y la calidad de vida de la zona.
La movilización fue convocada después de que la Comunidad de Madrid mantuviera la estación de Madrid Río dentro del parque homónimo, como parte de la Declaración de Impacto Ambiental para la ampliación de la Línea 11 de Metro, que se encuentra en proceso de consulta pública. El informe presentado propone reducir los árboles destinados a la tala de más de mil a 676 ejemplares, además del trasplante de 203 árboles. Aunque esta modificación busca mitigar el impacto, sigue generando inquietud entre los ciudadanos.
TALA DE ÁRBOLES, TAMBIÉN EN GETAFE
El proceso de terminar con los ejemplares para llevar a cabo este sistema de transporte público no se ha dejado ver solo en la capital. De hecho, la preocupación se ha extendido más allá de Arganzuela. Esto se debe a que Ecologistas en Acción de Getafe han alertado a través de sus redes sociales sobre la tala de árboles que también está produciendo en el barrio de Perales del Río, que se encuentra ubicado junto a la ribera del Manzanares.
“Alguien debería dar explicaciones de este atropello”, denunció la organización ecologista en sus redes sociales. En Facebook, los vecinos de Perales del Río también han expresado su malestar y críticas hacia las talas que se están desarrollando en la zona. Mediante fotografías y vídeos, han documentado el impacto negativo que estas obras están teniendo en el entorno natural y en el paisaje del barrio.
Las voces ciudadanas se han unido para defender la importancia de los árboles y la preservación de los espacios verdes en la ciudad. La concentración vecinal de este jueves representa solo una muestra de la creciente conciencia ambiental en la comunidad y la preocupación por la conservación de los recursos naturales.
SIGUIENTE PASO: LA COMUNIDAD DE MADRID
La Comunidad de Madrid y las autoridades responsables del proyecto deberán enfrentar los desafíos planteados por los ciudadanos y las organizaciones ecologistas, equilibrando las necesidades de transporte y desarrollo urbano con la protección del medio ambiente y los espacios naturales.
La ampliación del sistema de transporte público es importante para mejorar la movilidad y la conectividad en la ciudad, pero también debe ir de la mano de estrategias sostenibles que eviten daños irreparables al medio ambiente y al patrimonio natural de la comunidad.
La protección de los espacios verdes, la preservación de los árboles y la promoción de prácticas respetuosas con el medio ambiente deben ser objetivos prioritarios en la planificación urbana. La sostenibilidad no es solo un deseo, sino una necesidad para garantizar un futuro habitable y próspero para todos los ciudadanos de Madrid.
