Desde sus inicios, la Plaza Mayor de Madrid ha sido testigo silente de la evolución de la ciudad y de innumerables acontecimientos históricos que han dejado una huella imborrable en su empedrado.
En este artículo, nos adentraremos en los secretos y crónicas de este emblemático espacio, que sigue siendo un punto de encuentro y un escenario donde la historia y la vida moderna se entrelazan de manera fascinante.
1UNA PLAZA CON HISTORIA
La Plaza Mayor, situada en el corazón de Madrid, es una obra maestra de la arquitectura renacentista española. Su construcción se inició en 1617, durante el reinado de Felipe III, y fue diseñada por el arquitecto Juan Gómez de Mora. Desde entonces, ha sido testigo de numerosos eventos históricos, desde celebraciones reales hasta ejecuciones públicas durante la Inquisición.
Durante más de tres siglos, la Plaza Mayor ha sido el epicentro de la vida madrileña. En sus balcones se asomaban los espectadores para presenciar corridas de toros, autos de fe y todo tipo de eventos públicos. En la actualidad, este lugar se ha convertido en un punto neurálgico para el turismo, con numerosos restaurantes, tiendas y eventos culturales que atraen a visitantes de todo el mundo.