La historia de la Puerta del Sol se remonta a la Edad Media, cuando Madrid comenzaba a consolidarse como un núcleo urbano importante. En ese entonces, la zona albergaba una de las puertas de acceso a la ciudad, formando parte de la muralla medieval. Con el tiempo, la Puerta del Sol se convirtió en un punto de encuentro y comercio, donde se celebraban mercados y festivales.

Uno de los momentos más emblemáticos de la historia de la Puerta del Sol ocurrió en el siglo XIX, cuando el reloj que hoy corona la Casa de Correos se convirtió en un símbolo de la ciudad. La tradición de las campanadas de fin de año, que atrae a miles de personas cada Nochevieja, se inició en 1866 con la instalación de este reloj. Desde entonces, la Puerta del Sol ha sido testigo de innumerables celebraciones y eventos históricos.

Hoy en día, la Puerta del Sol sigue siendo un punto de encuentro y un lugar donde se entrelazan la cultura y el ocio. Sus calles y plazas circundantes albergan una amplia variedad de restaurantes, bares y tiendas que ofrecen lo mejor de la gastronomía madrileña y española. Aquí, los visitantes pueden degustar desde los famosos bocadillos de calamares hasta platos de alta cocina.

Además de la gastronomía, la Puerta del Sol es el escenario de numerosos eventos culturales y artísticos. El Teatro Español y el Teatro Calderón, ubicados en las proximidades, ofrecen una programación diversa que abarca desde obras de teatro clásicas hasta espectáculos de danza contemporánea.