En una encarnizada batalla legal y social, los comerciantes del Mercado de Torrijos han decidido resistir ante las tácticas agresivas de la socimi Numulae. Esta resistencia surge después de que el «fondo buitre» tapiara el acceso a cuatro tiendas, propiedad de comerciantes locales, en un controvertido intento de apoderarse de estas instalaciones icónicas ubicadas en el Distrito de Salamanca.
Numulae, domiciliada societariamente en Galicia, ha levantado lo que los comerciantes denominan un «muro de la vergüenza» para bloquear el acceso a las tiendas. Los propietarios, conocidos como ‘Los Últimos de Torrijos’, han decidido resistir y mantenerse en sus establecimientos, a pesar de las tácticas intimidatorias de la socimi. La decisión de resistir se tomó después de una reunión con abogados para evaluar las opciones legales disponibles.
En un acto de valentía, los comerciantes planean intentar acceder a sus tiendas el miércoles, 13 de diciembre, a las 9:30 de la mañana. El objetivo es sacar parte del género fresco y servirlo a domicilio a sus clientes, marcando así un gesto de desafío contra Numulae. Este intento no solo busca cumplir con la clientela fiel, sino también mantener la dignidad y enviar un mensaje claro de que no claudicarán ante lo que consideran un atropello.
DENUNCIA DE LOS COMERCIANTES DEL MERCADO DE TORRIJOS
El representante legal de los comerciantes presentó una denuncia en el Juzgado de Guardia, detallando los acontecimientos y solicitando medidas cautelares urgentes. Buscan que se retire el muro, se permita el acceso a los comerciantes y clientes, y que la actividad comercial pueda continuar en condiciones habituales. Se espera que el juez resuelva en los próximos días, aunque el caso ya lleva tres años en un Juzgado de lo Mercantil de Madrid.
Numulae, según los comerciantes, ha adquirido el control de casi todo el mercado de forma ilegal, pero no de ocho comercios que no han sido vendidos y tienen derecho a mantener su actividad. La socimi inició sorpresivamente unas obras, consideradas por los afectados como maniobras definitivas, para desalojar a los comerciantes y emprender su proyecto empresarial en una ubicación más atractiva.
La socimi afirma haber ofrecido a los comerciantes una reubicación en la planta baja, pero los afectados la consideran inaceptable, calificándola de «robo a la brava». La resistencia de ‘Los Últimos de Torrijos’ se mantiene firme, y han pedido apoyo a vecinos, organizaciones comerciales y representantes políticos para detener lo que consideran un “robo” inaceptable.
LUCHA POR LA SUPERVIVENCIA
La batalla por la supervivencia de estos comerciantes ha contado con un amplio apoyo social. Miles de personas han firmado un manifiesto de apoyo, denunciando la presión de Numulae y solicitando la mediación del Ayuntamiento de Madrid. La sociedad de inversión, con recursos ilimitados, ha mantenido una presión constante sobre los comerciantes, intentando forzar la venta de sus negocios.
Este enfrentamiento no solo tiene consecuencias legales, sino que también impacta en la comunidad y en el tejido comercial local. Los comerciantes de Torrijos no están luchando solo por sus negocios, sino por la preservación de un espacio que ha sido parte integral de la comunidad durante generaciones. La posibilidad de perder estos comercios locales amenaza con cambiar la dinámica y el carácter del área.
EL PAPEL DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID
El llamado a la mediación del Ayuntamiento de Madrid resuena con fuerza en esta disputa. Aunque el mercado fue vendido en 2005, los comerciantes consideran que el Ayuntamiento tiene una responsabilidad moral sobre él. La falta de intervención directa del Ayuntamiento podría dejar a los comerciantes enfrentándose a una empresa con recursos ilimitados, sin el respaldo necesario para resistir la presión constante.
La lucha por ‘Los Últimos de Torrijos’ ha trascendido las fronteras del distrito. El manifiesto de apoyo ha sido firmado por miles de personas de organizaciones comerciales nacionales y regionales, así como por usuarios y particulares. Este documento denuncia la presión de la sociedad de inversión y destaca la batalla desigual que enfrentan los pequeños comerciantes frente a una entidad con recursos ilimitados.
En conclusión, la resistencia de ‘Los Últimos de Torrijos’ marca una lucha determinada contra la voracidad de los «fondos buitre» y destaca la importancia de preservar los espacios locales en la era de la expansión urbana y las inversiones a gran escala. El desenlace de esta batalla no solo determinará el destino de cuatro tiendas en el Mercado de Torrijos, sino que también sentará un precedente para la defensa del comercio local en el corazón de las ciudades modernas. La comunidad espera que la justicia prevalezca y que, en última instancia, la solidaridad y el apoyo ciudadano puedan proteger la integridad de estos comerciantes que se niegan a ceder ante la intimidación de los “fondos buitre”.
