Leganés se ve confrontada desde hace décadas con un desafío urbano que ha marcado su paisaje y su identidad: la vía del tren de la C-5 de Cercanías. Ahora el vicealcalde ha solicitado a Óscar Puente que también actúe sobre la calidad ferroviaria de Leganés
El nuevo milenio trajo consigo la esperanza de poner fin a esta brecha ferroviaria. Diversos proyectos de soterramiento de las vías se pusieron sobre la mesa, acompañados de encuentros con el entonces Ministerio de Fomento. Incluso se llevó a cabo un experimento, soterrando en trinchera una parte del trazado férreo. Sin embargo, la crisis económica de los años siguientes desvaneció cualquier aspiración, ante los costos que implicaban estas obras monumentales.
En el presente, el vicealcalde y concejal de Obras, Carlos Delgado, ha encontrado el momento perfecto, durante la crisis que está sufriendo Cercanías Madrid. Aunque consciente de la magnitud de la empresa, Delgado no está dispuesto a dar por perdido el sueño del soterramiento. «Ha cambiado la tecnología», sostiene, señalando un posible camino hacia la viabilidad económica de un proyecto que durante mucho tiempo fue considerado prohibitivo.
LA HISTORIA PRESUPUESTADA EN LEGANÉS
La historia del soterramiento de las vías de la C-5 en Leganés ha estado marcada por presupuestos en millones de pesetas y promesas electorales que abrazaban esta causa. Incluso hasta el año 2014, apenas una década atrás, la idea seguía formando parte de las plataformas políticas locales. El Ayuntamiento, en una muestra de compromiso, destinaba anualmente un millón de euros a la espera de que el Ministerio y la Comunidad de Madrid decidieran finalmente embarcarse en esta monumental empresa.
Carlos Delgado, lejos de conformarse con ESTO, ve en los problemas actuales del servicio de Cercanías una oportunidad para resucitar la propuesta. La actividad en redes sociales del Ministro de Transporte, Óscar Puente, ha sido el catalizador para solicitar una reunión y presentar una propuesta audaz: soterrar la vía y liberar espacio para el desarrollo urbano.
El edil no escatima en señalar que este proyecto es mucho más que una obra de ingeniería; es una «infraestructura y proyecto de inversión millonaria» que requiere de la intervención y respaldo firme del Ministerio. En este contexto, Delgado ve en Óscar Puente el aliado necesario para convertir este sueño en realidad, destacando la necesidad de trascender las diferencias partidistas para trabajar en pro del bienestar de la ciudadanía.
SOLUCIONES «NOVEDOSAS» PARA ÓSCAR PUENTE Y COMPARACIÓN CON GETAFE
La visión de Carlos Delgado no se limita solo a la resurrección del proyecto, sino que también abraza la innovación. Habla de «nuevas técnicas» que podrían aportar «novedosas soluciones». La comparación con Getafe, donde el soterramiento de la C-4 de Cercanías se convirtió en una realidad gracias al liderazgo político, refuerza la idea de que Leganés merece aspirar a lo mismo.
La petición de reunión con Óscar Puente representa el primer paso en este ambicioso camino. Delgado, aunque realista, confía en que el Gobierno central buscará soluciones a los problemas del servicio de Cercanías, especialmente aquellos que afectan a la C-5. A lo largo de los años, la línea, que alguna vez fue motivo de orgullo, se ha transformado en una fuente de sufrimiento diario para miles de vecinos, marcada por retrasos, hacinamiento de pasajeros y descarrilamientos casi rutinarios.
El sueño de enterrar las vías del tren en Leganés, considerado durante décadas como una quimera, emerge nuevamente en un contexto de cambios tecnológicos y desafíos en el servicio de Cercanías. La propuesta de Carlos Delgado busca no solo superar la división física en la ciudad sino también mejorar la calidad de vida de miles de ciudadanos afectados por los problemas del Cercanías. ¿Será este el momento en que Leganés finalmente cierre la brecha ferroviaria que la ha dividido durante tanto tiempo? La respuesta podría estar en la colaboración entre el Ayuntamiento y el Ministerio de Transporte, marcando un hito histórico para esta próspera ciudad madrileña.
