La economía sumergida en la contratación de empleadas del hogar conlleva riesgos legales y consecuencias económicas para los empleadores de hasta 187.515 €.
En busca de un ahorro económico, muchas familias consideran la opción de contar con empleadas del hogar sin formalizar sus contratos por la vía legal, incurriendo en la economía sumergida. Sin embargo, esta práctica conlleva riesgos significativos que pueden suponer un impacto en la vida y economía de los empleadores.
Con la aprobación del Real Decreto Ley 16/2022, la responsabilidad para llevar a cabo la contratación y el alta en la Seguridad Social de las trabajadoras del hogar recae en las familias empleadoras, enfrentándose a consecuencias legales y económicas si no se llega hacer o si se efectuase de forma incorrecta.
El incumplimiento de esta normativa puede resultar en sanciones administrativas por no gestionar el alta de la trabajadora, no estar al día en las cotizaciones y pagos de la Seguridad Social de hasta 12.000 €, como también en reclamaciones por parte de la Seguridad Social de cuotas no abonadas, con un recargo del 20 %. Además, contratar empleadas del hogar sin permiso de trabajo válido, no ajustarse a los incrementos salariales ni cumplir con las vacaciones anuales puede resultar en multas de hasta 187.515 €. Un verdadero desafío al que se tienen que enfrentar las familias.
La ausencia de un contrato escrito presume que la relación laboral es indefinida y a tiempo completo, aumentando los riesgos para la familia empleadora. Aunque la empleada del hogar pueda aceptar trabajar inicialmente sin contrato, existe la posibilidad de que cambie de opinión y denuncie la situación de irregularidad, reclamando salarios no abonados y otros beneficios, afectando gravemente a la economía del núcleo familiar.
Paula Solaz, graduada social colegiada y responsable del Departamento Laboral de Gestoría en Casa, comparte un caso real que ilustra los peligros de esta práctica: “Recientemente, asistimos a una familia que, al contar con una empleada del hogar sin contrato, se tuvo que enfrentar antes de acudir a nosotros a sanciones considerables y una reclamación por salarios no abonados. Desde nuestra experiencia, sabemos que la gestión legal desde el principio habría evitado estos graves problemas económicos”.
La elección de contratar empleadas del hogar de manera ilegal, sin el respaldo contractual, se revela como una práctica arriesgada que enfrenta a las familias a sanciones legales y consecuencias económicas negativas. La clave para evitar estos peligros reside en la gestión legal y experta de la contratación de empleadas del hogar.
Empresas como Gestoría en Casa ofrecen un servicio especializado de gestión laboral para empleadas del hogar, bien sea para contrataciones existentes o nuevas, el equipo se encarga de todos los trámites y papeleos de forma online, garantizando tranquilidad a los empleadores. Estando al día con las normativas del Régimen Especial de Empleadas del Hogar, evitando sanciones. Los gestores especializados se ocupan de elaborar nóminas, contratos, documentación laboral, trámites en la Seguridad Social, altas y bajas, incapacidad temporal, y ofrecen asesoramiento laboral integral.
Contar con la ayuda de gestorías laborales especializadas garantiza que las familias cumplan con la normativa vigente en la contratación de empleadas del hogar y proporciona respaldo legal y seguridad tanto para los empleadores como para las empleadas del hogar.