¿Bienestar de los empleados? ¡No es gasto, es inversión!

En el entorno empresarial moderno, el bienestar de los empleados se ha convertido en una moneda de cambio crucial para atraer y retener talento. Atrás quedaron los días en los que futbolines, zona chill out y snacks gratis eran suficientes para mantener a un equipo contento y comprometido.

Hoy en día, el bienestar de los empleados es una estrategia integral que abarca la salud física, mental y emocional. Su importancia no puede ser subestimada, ya que está en juego el futuro inmediato de la empresa. De todo ello se habla con Helpers Speakers, expertos en motivación y bienestar corporativo y creadores de la Escuela de Conferenciantes (formación en oratoria para empresas y particulares)

Inversión en salud física

La salud física de los empleados es la base sobre la cual se construyen todas las demás áreas de bienestar. Invertir en programas de salud, alimentación y fitness no solo reduce el absentismo y bajas laborales, sino que también aumenta la productividad y la moral. Iniciativas como membresías gratis en gimnasios (o, incluso, montar el propio gimnasio en la empresa), talleres de cocina saludable y batch cooking… son ejemplos de cómo promover un estilo de vida saludable.

Salud Mental: Un pilar fundamental

La salud mental ha salido del armario corporativo y se ha colocado bajo el foco, en el centro del escenario. El estrés, la ansiedad y la depresión tienen un impacto negativo en el rendimiento de los empleados. Por ello, cada vez más empresas están implementando programas de asistencia al empleado (PAE), ofreciendo coaching, terapia y apoyo psicológico, y creando un entorno laboral que fomenta la apertura y la comunicación sobre la salud mental.

El equilibrio trabajo-vida: clave para la retención

El equilibrio entre la vida laboral y personal es un aspecto crítico del bienestar. Políticas como el trabajo flexible, el teletrabajo y las vacaciones ilimitadas no son solo beneficios atractivos; son declaraciones de que una empresa valora la vida fuera del trabajo de sus empleados tanto como su tiempo en la oficina.

Cultura y conexión: el tejido del bienestar

Una cultura empresarial positiva y un sentido de conexión entre los empleados pueden hacer maravillas para el bienestar general y, todo sea dicho de paso, en la productividad. Las actividades de team building son una forma de crear lazos más fuertes y potenciar el sentido de pertenencia.

En definitiva, el bienestar de los empleados no es un gasto; es una inversión en el capital humano que impulsa el éxito de cualquier organización. Las empresas que reconocen y actúan en consecuencia, no solo verán mejoras en la satisfacción y la productividad, sino que también estarán a la vanguardia en la guerra por el talento. En última instancia, el bienestar de los empleados es una inversión en el futuro de la empresa.

Para ahondar más, Helpers Speakers asegura: “Sin duda, (comenta Jesús Ripoll, CEO de Helpers) toda partida presupuestaria destinada a la Salud Organizacional es una inversión de beneficios innumerables, hoy en dí,a es indispensable atender a las necesidades profesionales y personales de los empleados. No solo a nivel formativo, sino también a nivel de salud, clima laboral y orgullo de pertenencia”

Al preguntarle sobre las ventajas, no lo duda: “Desde la reducción de la rotación de personal hasta el incremento en la calidad del trabajo, pasando por una mejora en la imagen de marca, las empresas que apuestan por la felicidad de sus equipos están marcando la pauta en el mercado, se traduce en un círculo virtuoso de éxito y satisfacción”

En conclusión, el bienestar en las empresas es una tendencia que ha llegado para quedarse. Con la ayuda de expertos como Helpers Speakers, las organizaciones pueden navegar con éxito las aguas del bienestar corporativo, asegurando no solo la felicidad de sus empleados, sino también la salud y el futuro de la empresa.

Un ambiente laboral saludable ofrece múltiples beneficios tanto para los empleados como para la empresa. Aumento de la creatividad, disminuyen los errores, mejora las relaciones interpersonales entre los colaboradores, con los proveedores y con los clientes, mayor energía y ánimo para trabajar, los equipos se sienten más seguros y motivados a implicarse e, incluso, a proponer mejoras, una comunicación clara y abierta contribuye a un mejor rendimiento laboral, incrementa el compromiso con los objetivos empresariales…

Al preguntarle a Jesús Ripoll de Helpers Speakers qué perfiles de su dossier de representados son los que nos recomendaría para fomentar un mejor clima en las empresas, su respuesta fue: “talleres sobre control del estrés con la psicóloga Alejandra Vallejo-Nájera, de neurofelicidad con cualquiera de estas dos doctoras de renombre: Ana Asensio o Mónica Kurtis, sesiones de coaching con un verdadero experto que lleva años dedicado a ello y de prestigio internacional como Aldo Civico, talleres de primeros auxilios y riesgos laborales con el influencer -que arrasa en RRSS- Miguel Assal, comunicación filio-parental con Pedro García Aguado…(el problema de comunicación con hijos adolescentes es una realidad muy presente en muchos trabajadores) y, sin duda, la joya de la corona ahora mismo, sesiones de mindfulness con el referente indiscutible: Tony Rham”

Hace ya unos años que esta práctica de atención plena y meditación se ha colado en los rascacielos de cristal. Al preguntar sobre los beneficios del mindfulness en el entorno empresarial, Raquel S. Armán, cofundadora de Helpers Speakers, destaca: “ayuda a los empleados a manejar mejor el estrés. Fomenta una mayor organización en las tareas y responsabilidades, que lleva a una mejora en la eficiencia y la productividad. Al promover una mayor conciencia y comprensión, disminuye la conflictividad en el lugar de trabajo y ofrece una forma saludable para que los empleados liberen tensiones y se recarguen mentalmente. Todo ello contribuye, indiscutiblemente, a mejorar el clima, aumenta la productividad y el compromiso” y continúa explicando los beneficios de cara los directivos: “Ayuda a formar líderes más conscientes y empáticos, lo que se traduce en un efecto positivo en toda la organización”.

Estos beneficios reflejan cómo el mindfulness puede ser una herramienta valiosa para mejorar no solo el bienestar individual de los empleados, sino también el rendimiento y la salud general de la empresa. Raquel continúa: “lamentablemente, con el tema del mindfulness está ocurriendo lo mismo que con el coaching, hay un spam imparable de autodenominados gurús. Por eso, siempre es aconsejable contar con verdaderos expertos y referentes como es el caso de Tony Rham, que no necesita crearse un personaje, ir descalzo, vestir túnicas ni quemar varitas de incienso”.

Sin duda, en el vertiginoso mundo empresarial actual, donde el estrés y la competitividad marcan el ritmo del día a día, siempre es de agradecer el poder contar con una figura como Tony Rham, el maestro de mindfulness que está redefiniendo el bienestar en el trabajo.

Sus conferencias y talleres no son solo una pausa en la rutina; son una revolución de la consciencia que invita a las empresas a navegar hacia un rendimiento óptimo a través de la calma y la claridad mental.

Rham enseña que la atención plena no es solo una práctica, sino un estilo de vida que puede llevar a las organizaciones a alcanzar sus metas con una nueva perspectiva, más humana y sostenible.

Su famoso podcast ‘Espacio Mindfulness’, es un testimonio de su profundo conocimiento y su habilidad para guiar a los oyentes a través de un viaje de autodescubrimiento y crecimiento personal. Cada episodio es una invitación a cuestionar lo establecido y a encontrar respuestas únicas y personales a preguntas fundamentales sobre la vida y la espiritualidad.

Jesús Ripoll concluye: “Las empresas que han incorporado los principios de Rham reportan una mejora significativa en la salud mental de sus trabajadores, un aumento en la productividad y una atmósfera laboral más armoniosa. Sus conferencias y talleres son una inversión en el capital humano, una apuesta por un futuro donde el éxito empresarial y el bienestar personal van de la mano”.

¿Bienestar de los empleados? ¡No es gasto, es inversión! ¿Bienestar de los empleados ¡No es gasto es inversion