Las piscinas municipales han formado parte de muchos recuerdos de verano de los ciudadanos. Con la llegada de la pandemia, el Ayuntamiento de Madrid trabajó para que los madrileños pudieran continuar disfrutando sin poner en riesgo la salud. Un año después, aseguran que el refrescarse en las piscinas municipales “triunfa” entre los bañistas y lo consideran como “uno de los mejores veranos” sin incidencias.
Según han señalado fuentes del área de Deportes, hasta el momento se han vendido más de un millón de entradas a las piscinas municipales. La cifra supone el doble de los pases que se vendieron en 2020, un total de 543.500 entradas. Además, también ha superado la temporada sin pandemia de 2019, cuando se alcanzó las 682.000 entradas vendidas.
Madrid tiene abiertas 19 de las 22 piscinas municipales, lo que supone también el mayor número de los últimos años. Las tres que no abren están pendientes de obras de remodelación.
Los usuarios tienen dos turnos, de 9 horas a 14.30 horas y de 16.30 horas a 21 horas, donde las dos horas intermedias son para desinfección de zonas, vestuarios y elementos comunes.
La temporada abrió el pasado 15 de mayo con el 90% de las piscinas municipales de Madrid, coincidiendo con la festividad de San Isidro, con tres meses de duración hasta el 12 de septiembre, que ha estado hasta ahora marcada por limitaciones de aforo al 60% y turnos para garantizar que no se produzcan aglomeraciones.
“A día de hoy, estamos ante uno de los mejores veranos sin casi incidentes que reseñar y donde el refrescarse en las piscina triunfa entre los bañistas”, han expresado fuentes del área de Deportes.
Su titular, Sofía Miranda, ha asegurado que este incremento “demuestra la aceptación” que tienen las piscinas municipales de verano entre la ciudadanía madrileña como “alternativa de ocio” para los días de más calor.
En términos generales, está siendo una temporada “tranquila”, en la que “no ha habido incidencias reseñables” y en la que se ha constatado un “buen comportamiento” de los usuarios, a pesar de las limitaciones derivadas de la pandemia.
INCIDENCIAS “RESIDUALES”
Asimismo, la concejala de Ciudadanos ha resaltado la confianza que hay con el plan de contingencia que han organizado para prevenir las agresiones o conflictos que “siempre han sido un clásico durante todos los veranos” y ha destacado que las incidencias que ha habido han sido “residuales”.
“Debemos estar contentos, aunque aún queda verano y pueden pasar cosas, pero creo que el plan de piscinas está funcionando y su evidencia es que apenas ha habido conflictos gracias a la concienciación que tiene la ciudadanía de respetar las medidas”, ha señalado Miranda.
‘MADRID MÓVIL’, UNA APUESTA LISTA PARA QUEDARSE
Un 94% de los usuarios han obtenido su entrada a través de la aplicación ‘Madrid Móvil’. Este canal del Consistorio, además de comunicar avisos o incidencias en la capital, se ha utilizado para realizar gestiones deportivas dentro del marco ‘Madrid es Deporte’.
La aplicación surgió en la temporada del año pasado, cuando la Covid-19 era “más fuerte” y las medidas de seguridad “más rígidas”. Miranda ha explicado que las piscinas de verano se han caracterizado por las colas largas para comprar las entradas y con la pandemia de por medio, buscaban evitar esa situación.
De esta forma, del total de entradas vendidas en 2020, 506.000 se adquirieron ‘online’ a través de la aplicación Avisos Madrid o de la web del Ayuntamiento, y 37.500 se vendieron en taquilla dentro del 10% reservado para personas mayores o con discapacidad.
Además, ha resaltado que ‘Madrid Móvil’ “va a quedarse” para desarrollar más contenido y servicios para la ciudadanía por “cuestión de modernidad” y dar “un paso más” a la era digital. De esta forma, los ciudadanos podrán acostumbrarse a utilizar cualquier cuestión por la aplicación.
En este sentido, los usuarios pueden acceder a los servicios personalizados en centros deportivos municipales desde el portal de Internet con el reconocimiento de los descuentos a los que tuviera derecho y al uso de su monedero virtual.
La interfaz de acceso tiene las funcionalidades de monedero, entradas (solo habilitada en temporada de verano), reservas de espacios deportivos, disponibilidad de plazas vacantes, clases abiertas, uso libre y última hora. Así, la tarjeta ofrece la posibilidad de acceder a los servicios deportivos de una manera “cómoda y ágil”.
