Entre Lavapiés y Embajadores, en pleno corazón de Madrid, se encuentra una de las bibliotecas más bonitas del mundo. Se trata de la Biblioteca de las Escuelas Pías, un lugar dedicado al estudio y a la lectura en las ruinas de una antigua iglesia. Tras más de dos años cerrada por obras, el centro reabrió el pasado 1 de septiembre para recibir a los alumnos que quieran estudiar allí. La icónica azotea, que se aposenta sobre el edificio histórico, no abrirá por problemas de licencia y ruido.
El origen de esta singular biblioteca se remonta a la segunda mitad del siglo XVIII. Fue construida con los donativos de los reyes Carlos III y Carlos IV junto a otros personajes notables que decidieron levantar una iglesia en la calle Tribulete número 14. El templo religioso fue construido por el hermano Gabriel Escribano, que sobre una una nave cuadrangular adosada a una rotonda, erigió una suntuosa cúpula. Dicha rotonda fue decorada con ocho columnas istriadas de capiteles compuestos y tuvo por acceso un enorme arco de medio punto decorado con el escudo de las Escuelas Pías, obra de Alfonso Vergaz.
Doscientos años más tarde de su construcción, las Escuelas Pías de San Fernando fueron declaradas Bien de Interés Cultural, una figura jurídica que tiene como objetivo la protección del patrimonio histórico español. La Biblioteca se ha sometido a varias rehabilitaciones que han consistido en trabajos de mejora para convertir este espacio centenario en una moderna biblioteca y Centro Asociado de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
EL PRIMER COLEGIO DE SORDOMUDOS DE ESPAÑA
Según documentos históricos, las Escuelas Pías de San Fernando fueron el primer colegio que hubo en la capital de la orden de los Escolapios. Esta institución educativa religiosa nació con el objetivo de formar a niños pobres y fue la primera escuela de sordomudos de España. Las Escuelas Pías de Lavapiés acogieron este primer aula para la formación aunque posteriormente se trasladaría a la Casa de la Panadería, donde permanecería bajo el amparo de la Sociedad Económica Matritense de Amigos del País.
Esta institución educativa religiosa nació con el objetivo de formar a niños pobres
En esta singular escuela dedicada a los niños con mayores necesidades, estudiaron militares y políticos de renombre como Benigno Cafranga, Rafael Ulecia y Carlos Aris; escritores y literatos como José Baró, Mariano Calvo Hernando, Torio de la Riva; y críticos de cine, catedráticos y médicos como Sánchez Albornoz, Mariano Benavente y Enríquez de Salamanca.
Gracias a la gran calidad e innovación de sus técnicas educativas, las Escuelas Pías de San Fernando pronto adquirieron gran relevancia en la Corte. Es por ello, que personajes ilustres de la aristocracia madrileña llegaron hasta esta escuela como por ejemplo los condes de Villalobos y los marqueses de Cerralbo. Hoy, este espacio alberga un centro de estudio de la UNED al que pueden acceder los alumnos que quieran estudiar bajo esta suntuosa cúpula que culmina una de las bibliotecas más bonitas del mundo.
