Los votos de la oposición (Más Madrid, PSOE y Vox) consiguieron sacar ayer adelante en el Pleno de Retiro la “reapertura total” del Rastro con el 100% de los puestos del mercadillo.
Más Madrid y PSOE elevaron al Pleno de Centro una proposición para que el cien por cien de los puestos del Rastro puedan volver a instalarse en sus ubicaciones anteriores, después de los estudios pertinentes y cumpliendo las medidas de seguridad anti-Covid necesarias.
“En el Wizink Center pueden entrar 15.000 personas y en el Wanda 70.000 pero el Rastro no puede abrir 100% estando al aire libre. Se aprueba con el voto en contra del PP y Cs la reapertura total del Rastro”, ha escrito Más Madrid Centro en sus redes sociales.
Este equipo de Gobierno dice sí a aumentar aforos en hostelería pero no en el Rastro, de cuya reapertura tanto presumieron. Todo coherencia”, ha lamentado la Agrupación Socialista de Centro.
La Asociación Cultural El Rastro Punto Es, a través de su portavoz, Mayka Torralbo, ha felicitado y agradecido “que toda la oposición política ha votado a favor de este regreso a la normalidad”.
“Estamos al aire libre, llevábamos ocho meses cerrados sin poder trabajar y reabrimos pero a medio gas, sólo el 50% de los puestos de manera alterna los domingos y festivos. Es muy importante para nuestra situación económica volver a la normalidad“, ha señalado Torralbo.
La portavoz ha remarcado que en este momento, “cuando se están abriendo todas las actividades económicas, culturales y de ocio levantando las restricciones, es el momento de regresar porque además la ciudadanía así lo pide”.
La asociación lamenta que PP y Cs hayan votado en contra de la propuesta de reapertura total aunque entienden que tendrán que “ejecutarla como mandato democrático”.
OCHO MESES DE CIERRE
El pasado noviembre comerciantes del Rastro y el Consistorio de la capital acordaban que el tradicional mercado madrileño reabriera tras ocho meses sin actividad. Así, con el control de aforo por parte del Ayuntamiento, cada domingo se instala la mitad de los puestos, unos 500, de forma alterna.
Uno de los puntos de fricción entre Consistorio y comerciantes fue el emplazamiento de los puestos, lo que se conoce como ‘la huella’. Han cambiado su ubicación tradicional por la pandemia, si bien el Gobierno municipal se comprometía a volver a adoptar el antiguo emplazamiento cuando las condiciones así lo permitan.
Según lo acordado, son por el momento 81 puestos en la plaza de Cascorro, 190 en Ribera de Curtidores; 82 en la plaza del General Vara del Rey; 120 se instalarán en la plaza Campillo del Mundo Nuevo; 16 irán destinados a la calle de Carlos Arniches y 11 a la calle de Mira el Río Baja.
