El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, volverá a dar explicaciones este viernes en un Pleno monográfico y extraordinario sobre el presunto espionaje a la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, con recursos municipales.
La sesión, que arrancará a las 9 horas en el Palacio de Cibeles, llega solo tres días después de que se aprobara la realización del mismo a través de una moción de urgencia con el visto bueno de todos los grupos, salvo Vox, en el último Pleno ordinario de la capital.
Se celebrará, además, después de que el socio de Gobierno, Ciudadanos, haya recibido ya toda la información que había requerido a los ‘populares’ en el consejo extraordinario de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) celebrado el pasado viernes.
El vicepresidente de esta empresa municipal, Mariano Fuentes (Cs), sigue sosteniendo que su presidente, Álvaro González, del PP, no ha mantenido la misma versión que el alcalde al negar que se haya llevado a cabo una investigación.
“Todas las pruebas que han aparecido en los medios avalan la versión que dimos desde el primer momento. Que se me dio traslado de una información de la presidenta, que no venía sustentada en indicio probatorio. Era una información de la que consideré hacer averiguaciones si se podía haber producido alguna averiguación”, explicaba el regidor este pasado martes en el Pleno ordinario.
A continuación, según su versión, se le hicieron “hasta 16 llamadas” a la empresa de detectives “y se negó”. “Se contactó con personas de la EMVS para ver si se produjo un contacto. Se negó. Se revisó la contratación de la empresa de la EMVS durante los dos últimos años para ver si hubo un encargo o gasto de fondos públicos. Ni el detective reconoce que hubo reunión, ni personas de EMVS reconocen contacto, ni encargo”, detalló.
Este presunto espionaje se ha llevado por delante al hasta ahora director general de Coordinación de Alcaldía, Ángel Carromero, que pese a que “negó” estar involucrado en el mismo, según el primer edil, presentó su cese “con efecto inmediato” para preservar la imagen de la institución y “poder defenderse mejor”.