El comienzo de las obras de conexión de la avenida Isabel de Farnesio con la M-513, enfrenta a los vecinos de Boadilla con su ayuntamiento
El Ayuntamiento de Boadilla del Monte va a iniciar esta semana las obras de conexión de la avenida Isabel de Farmesio con la M-513 a la altura de los puntos kilométricos 6,500 y 6,900 que cuentan con un plazo de ejecución de cinco meses.
Para el ayuntamiento, la actuación permitirá una mejora en la distribución del tráfico, al simplificar el acceso hacia y desde la M-50, y descongestiona otras entradas y salidas del municipio, logrando así una reducción de la circulación rodada en el término municipal.
Para los vecinos de la zona, que parece que han creado una plataforma vecinal, “SALVEMOS BOADILLA DEL TRÁFICO” quiere con sus protestas, prevenir el impacto medioambiental de la conexión con la M-513, y evitar el ruido y la contaminación de esta apertura al tráfico. Para esta plataforma es necesario realizar un Estudio acústico de tráfico y movilidad sostenible, debido al posible aumento del tráfico rodado por unas avenidas que actualmente son muy tranquilas.
El alcalde ha compartido con los vecinos afectados, que se trata de una actuación histórica que ya estaba contemplada tanto en el Plan General de Ordenación Urbana de 1992 como en el de 2003 e iba su ejecución no solo en este programa electoral, sino que había sido prometida mucho antes.
Además, el alcalde les ha recordado que tampoco tiene lógica retrasar por más tiempo una medida que descongestionará el tráfico y mejorará la movilidad en el municipio teniendo en cuenta que este es uno de los mayores retos que tenemos como localidad.
Esta es una de las pocas medidas que están en manos del Ayuntamiento realizar para mejorar el transporte y la movilidad junto a las obras de construcción de una rotonda en esta misma vía, la M-513, a la altura del colegio Mirabal Infantil, que ya están en marcha, un carril más de acceso directo a la M-50 dirección sur, proyecto que estamos licitando, y la conexión de Viñas Viejas con El Encinar a través de un puente que haga que se tome la M-50 desde otro acceso menos congestionado.
Dicho esto, como en todas las zonas de Boadilla se hace constantemente, el ayuntamiento promete estudiar medidas que minimicen las molestias que esta conexión pueda acarrear a los vecinos del entorno.
Dotado con un presupuesto de 775.005 euros IVA incluido, la obra contempla la ejecución de dos carriles de acceso, uno en cada sentido, así como la construcción de una pasarela peatonal para dar continuidad al camino existente.
Los carriles de aceleración y deceleración proyectados precisarán de la remodelación del cruce de estos carriles con la avenida Isabel de Farnesio y las calles Francisco de Goya e Isabel II.
Se procurará que la obra tenga el menor impacto posible sobre el tráfico de la zona que, al ser periodo estival, se verá reducido por las salidas vacacionales.
Los árboles que puedan verse afectados por la actuación serán trasplantados.
