La Diócesis de Getafe y el Ayuntamiento de Getafe han firmado este jueves un protocolo para trasladar la sede del Obispado a un edificio inacabado desde hace años que iba a ser la Casa Regional de Murcia en el barrio de Getafe Norte, propiedad del Consistorio, por lo que recibirá un canon por su cesión.
De esta forma, la Diócesis de Getafe devolverá la propiedad municipal del edificio de la calle Almendro, que ha albergado la sede del Obispado desde sus inicios, trasladándose en un plazo aproximado de un año, ya que se prevé que las obras para habilitar el edificio a medio construir puedan comenzar en los próximos meses.
El obispo Ginés García Beltrán ha manifestado que para la Diócesis de Getafe este protocolo supone “un paso adelante en la mutua y cordial colaboración con el Ayuntamiento y un instrumento para el desarrollo de la labor que ambos ejercen, siendo un ejemplo más del diálogo y la amistad social en la que se deben basar las relaciones”.
Además, el prelado ha mostrado su “alegría” por la consecución, “después de meses de trabajo, de este acuerdo, que visibiliza que es posible el entendimiento y la colaboración entre instituciones que buscan el bien común, con lo que se va a contar con un nuevo centro de operaciones para la Diócesis y un espacio para desarrollar la obra social, asistencial y cultural”.
Una vez que se produzca la reversión del uso de la actual sede del Obispado, el Ayuntamiento habilitará en su lugar un Centro de Día polivalente, en el que se invertirán unos 2 millones de euros, donde se podrán en marcha programas que beneficiarán a 385 personas mayores, según ha explicado la alcaldesa Sara Hernández.
En su opinión, “el sistema de residencias tradicional, como está pensado, se ha demostrado ineficaz, y por eso es tan importante este proyecto piloto que servirá de ejemplo para Getafe y otras ciudades”.