Algunas personas sienten limitaciones al tener que enfocar objetos a larga distancia. Estas, sin saberlo, pueden padecer de miopía.
Lejos de ser un problema irreversible, se trata de uno de los defectos más comunes, pero por fortuna, puede ser corregido, tanto de manera temporal como permanente.
El Instituto Oftalmológico Dexeus realiza un servicio de asistencia de calidad, enfatizando tanto en cuidados preventivos como en intervenciones quirúrgicas con tecnología actualizada.
La miopía y su definición
La miopía es un defecto refractivo que provoca visión borrosa de los objetos a larga distancia. Ocurre cuando la luz que ingresa en el ojo se proyecta delante de la retina en lugar de sobre esta. Cuanta más distancia hay entre esta proyección y la retina, mayor será la miopía. A su vez, si el reflejo ocurre detrás de la retina se denomina hipermetropía, mientras que si se proyecta en distintos lugares se conoce como astigmatismo.
Entre los motivos por los cuales ocurre la miopía, hay tres que son los más comunes: un ojo más alargado de lo normal, una elevada potencia del cristalino y una córnea más curvada. Si bien la miopía afecta a hombres y mujeres por igual, es una condición propensa a ser heredada. Cabe destacar que el ojo que sufre miopía, si esta no es muy elevada (inferior a 6-8 dioptrías), no deja de ser un ojo sano, simplemente necesita un ajuste de la refracción. Cuando la graduación es elevada, superior a 8 dioptrías, suele acompañarse de alteraciones en los tejidos oculares. En estos casos, la miopía puede considerarse una verdadera enfermedad y no es suficiente con corregir las dioptrías.
La miopía es un defecto que tiene que ver con cómo la luz ingresa en el ojo. Puede ser causado, como ya se indicó, por factores hereditarios, pero también puede ser vinculado a otras enfermedades, como cierto tipo de diabetes o las cataratas. El excesivo uso de pantallas puede ser un causante, aunque aún no hay estudios que lo determinen.
Lo que sí ya está confirmado es la relación entre la miopía y las actividades al aire libre. El enfocar objetos a distancia y la luz solar natural frenan la aparición y progresión de la miopía y, de la misma forma, cuando se pasan muchas horas en lugares con poca luz natural y enfocando de cerca, aumenta la incidencia y progresión de la miopía.
Tratamientos para la miopía
Existen distintos niveles de miopía y, con ello, distintos enfoques para su tratamiento. Básicamente, se diferencian entre miopías de baja graduación, hasta 6 dioptrías (miopía simple) y miopías de alta graduación, superiores a 6 dioptrías y, dentro de estas últimas, se diferencia entre las que no tienen trastornos en los tejidos oculares y las que sí lo tienen (retina, vitreo, presión elevada, etc.).
Dentro de los tratamientos posibles, también se distinguen dos grandes grupos: con y sin cirugía.
El uso de gafas es el método más común para corregir la miopía sin intervención quirúrgica. En algunos casos, como por ejemplo para la práctica de deportes, se puede corregir con la adaptación de lentillas.
En el caso de que se opte por una cirugía, la corrección resulta permanente. Para ello, el paciente debe ser mayor de 18 años y debe poseer un tipo de miopía estable, es decir, que no ofrezca variaciones significativas durante un año. La misma operación puede emplearse para corregir adicionalmente el astigmatismo.
Cuando la miopía se acompaña de alteraciones en los tejidos oculares, hay que hacer un tratamiento combinado, gafas o cirugía y de la patología asociada.
El Instituto Oftalmológico Dexeus opera con técnicas láser, además de realizar también la implantación de una lente intraocular.