Con el paso de la edad, la producción de colágeno en la piel va disminuyendo, dando origen a la aparición de arrugas y flacidez.
Como consecuencia, el rostro luce opaco y poco terso. Afortunadamente, gracias a los avances de la estética facial, existen tratamientos no invasivos que ayudan a tener una piel sana, sin necesidad de una intervención quirúrgica.
Uno de los más demandados en la actualidad es la radiofrecuencia facial. Consiste en una técnica en la cual se aplica sobre el rostro ondas electromagnéticas de alta frecuencia que calientan de manera controlada las capas más profundas de la piel, incentivando la producción de colágeno y elastina, logrando un efecto similar al lifting, pero sin cirugía.
Para conseguir óptimos resultados a partir de este tratamiento, debe ser aplicado por un equipo de profesionales de la estética.
En este sentido, Germaine Goya es un centro de belleza con más de 15 años de experiencia en la aplicación de tratamientos estéticos utilizando tecnología de vanguardia del sector.
Especialistas en radiofrecuencia facial con Indiba
La estética ubicada en barrio de Salamanca, en Madrid, ha sido reconocida como uno de los mejores centros de belleza en España, según TripAvdisor, debido a la calidad en los tratamientos faciales y corporales que ofrecen. Esto se debe a que priorizan el uso de aparatología de última tecnología.
Para el rejuvenecimiento del rostro, utilizan Indiba, una máquina de radiofrecuencia que trabaja con una frecuencia específica de 448 kHz, que protege la integridad de los tejidos de la piel, sin destruirlos, logrando un equilibrio biológico de las células y la producción natural de colágeno.
Gracias a estos beneficios, la piel logra regenerarse de manera natural, volviéndose más tersa, reafirmada y luminosa. Además, se reducen las arrugas y líneas de expresión, el óvalo facial vuelve a definirse y se reduce la grasa acumulada en la papada, por lo que las personas que se someten a este tratamiento consiguen un aspecto más joven y sano.
Rejuvenecer el rostro con un procedimiento estético indoloro
Para la aplicación del tratamiento de radioterapia facial, el equipo de profesionales de Germaine Goya realizan un diagnóstico previo para evaluar la condición del cliente. Si es apto para el procedimiento, retiran todas las piezas metálicas que tenga el paciente y proceden a aplicar el protocolo de higiene facial.
A continuación, colocan la placa de retorno de Indiba en la parte superior de la espalda del paciente, asegurándose que esté en contacto con su piel. Seleccionan el tipo de manípulo resistivo y determinan la potencia y el tiempo de las sesiones. El aparato se desliza lentamente sobre el rostro, consiguiendo una percepción térmica suave y agradable para el paciente. Posteriormente, el procedimiento finaliza con la aplicación de una crema hidratante que aporta una sensación fresca en el rostro.
De acuerdo con investigaciones científicas, la radiofrecuencia facial no causa efectos secundarios. Sin embargo, no es recomendable para mujeres embarazadas, personas con marcapasos, VIH, dermatitis, entre otras patologías de la piel. Por esta razón, es importante una revisión previa en centros estéticos autorizados como Germaine Goya.