10 años de la obligatoriedad del certificado energético en España

El fundador de la empresa consultora Vatios Verdes, Javier Andrés Alda, recordó que el próximo 1 de junio se cumplirán 10 años del certificado energético. Mostrar este documento se ha convertido en uno de los requisitos indispensables para vender o alquilar cualquier propiedad en España, según el Real Decreto 390/2021.

Este aval indica a las autoridades el nivel de consumo energético y la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero que tiene un inmueble. La adopción de esta certificación en España a partir del 2013 fue consecuencia de una Directiva Europea que los Estados miembros debían acatar desde entonces.

Entendiendo en detalle el certificado energético

Vatios Verdes es una empresa consultora que trabaja en la emisión de la Certificación Energética a solicitud de particulares o firmas inmobiliarias. También realizan estudios e instalación de sistemas de energía fotovoltaica a partir de paneles solares sobre las cubiertas de las casas. Con ello mejoran los niveles de eficiencia energética en los inmuebles, contribuyendo así al ahorro en la factura eléctrica.

Sobre el certificado energético, Javier Andrés Alda explicó que actualmente todo inmueble de 500 m² o más tiene la obligación de tener su correspondiente calificación. La responsabilidad de obtenerla la tiene el propietario, quien debe contratar a un técnico certificador adscrito a una compañía especializada, como por ejemplo, Vatios Verdes.

El resultado de la evaluación de la empresa certificadora se resume en una etiqueta energética que muestra una letra. Esta indica el nivel de consumo energético y de emisiones de CO₂ que tiene dicho inmueble. Alda recuerda que las escalas van desde la A que es la más alta calificación hasta la G, que es la menos eficiente.

Mayor interés por la eficiencia energética

El fundador de Vatios Verdes indica que después de una década, la obligatoriedad del certificado energético ha generado un mayor interés por el tema. Ahora existe una cultura en la que los dueños de viviendas o locales se preocupan porque sus propiedades consuman menos energía y sean más eficientes.

Alda explica que este fenómeno se debe a que el Estado ha buscado mecanismos para estimular este comportamiento a través del certificado energético. Por ejemplo, es una etiqueta que se debe mostrar en cualquier publicidad que promocione un inmueble para alquiler o venta. Obviamente, mientras mejor sea la calificación, mejor cotización tendrá en el mercado.

Desde el punto de vista legal, el certificado energético debe formar parte del expediente en el momento de la firma. Esto aplica tanto en los contratos de compraventa como en los de alquileres. En esos casos el propietario debe entregar al inquilino un documento de recomendaciones de uso para optimizar el consumo energético. El fundador de Vatios Verdes advirtió que el incumplimiento de estas disposiciones acarrea multas de hasta 6.000 euros, en los casos muy graves.

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