En un esfuerzo por combatir los grafitis, pintadas vandálicas que han afectado a la estética de la capital, el Ayuntamiento de Madrid ha anunciado el lanzamiento de las ‘patrullas anti-graffiti.
La vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad, Inma Sanz, confirmó que estas patrullas, compuestas por 40 agentes, estarán operativas a mediados de octubre. También han dejado claras cuáles son las posibles sanciones de los grafiteros y a cuanto asciende la cifra que deberán pagar.
En sus declaraciones a los periodistas, tras visitar el primer Centro Intergeneracional en Arganzuela, la vicealcaldesa, Inmaculada Sanz, subrayó la importancia de erradicar las situaciones vandálicas que afectan negativamente a diversas áreas de la ciudad. «Las pintadas vandálicas no tienen cabida en nuestra ciudad, afean y degradan de una manera tremenda las zonas del centro de la capital y de algunos otros espacios, y, por lo tanto, lo vamos a combatir», explicó Sanz.
De esta forma, ha dejado claro que en la capital ya no se van a dejar pasar más actos vandálicos de este tipo. Hay que tener en cuenta que la capital cuenta con muchas pintadas, sobre todo en las estaciones y vagones de Adif y Renfe, además de en las propias calles emblemáticas de la capital.
COORDINACIÓN CON MEDIO AMBIENTE PARA AMPLIAR LA LIMPIEZA DEL GRAFITI
Además de la acción directa contra el grafiti, Sanz anunció que estas patrullas trabajarán en estrecha colaboración con el área de Medio Ambiente para ampliar los esfuerzos de limpieza en la ciudad. Este enfoque integral tiene como objetivo abordar no solo la prevención, sino también la restauración de áreas ya afectadas por el vandalismo visual.
Como parte de esta iniciativa, se ha anunciado un incremento significativo en las sanciones a los grafiteros. Sanz enfatizó que «el grafiti no es arte, sino vandalismo, y que se tomarán medidas más estrictas para disuadir estas acciones». Las sanciones ahora oscilan entre 2.000 y 3.000 euros, con la obligación de reparar los daños, además de la multa. En caso de reincidencia, las sanciones se elevarán a montos que van desde los 4.000 hasta los 6.000 euros.
INMACULADA SANZ:«el grafiti no es arte, sino vandalismo»
Como parte de esta iniciativa, se ha anunciado un incremento significativo en las sanciones a los grafiteros. Sanz enfatizó que el graffiti no es arte, sino vandalismo, y que se tomarán medidas más estrictas para disuadir estas acciones. Las sanciones ahora oscilan entre 2.000 y 3.000 euros, con la obligación de reparar los daños, además de la multa. En caso de reincidencia, las sanciones se elevarán a montos que van desde los 4.000 hasta los 6.000 euros.
TIPOS DE SANCIONES A GRAFITEROS
En cuanto a las posibles sanciones a los grafiteros, se encuentran que si es el primer incidente, por pintadas vandálicas, la multa asciende a 2.000 euros y tiene la obligación de reparar los daños causados. Para los grafiteros que son reincidentes, es decir, en el segundo incidente en adelante, las multas se incrementan. En este sentido, oscilan entre los 4.000 y 6.000 euros, y además, se sigue manteniendo la obligación de reparación de daños. Así, de esta manera, se aseguran que las pintadas desaparezcan y que los causantes de estos actos vandálicos paguen por estos incidentes.
Estas medidas buscan enviar un mensaje contundente sobre la gravedad de estas acciones y el compromiso de la ciudad para preservar su patrimonio urbano. La aplicación firme de estas sanciones, respaldada por la presencia activa de las patrullas anti-grafiti, tiene como objetivo disuadir a aquellos que participan en actividades vandálicas y preservar la belleza de Madrid. La implementación exitosa de estas patrullas y sanciones podría sentar un precedente para otras ciudades que buscan abordar problemas similares en sus espacios urbanos.
SECCIÓN DE PROTECCIÓN DEL PATRIMONIO URBANO
La patrulla, que llevará el nombre de «Sección de Protección del Patrimonio Urbano», se desplegará con unos 40 efectivos. Esta sección, compuesta por 12 agentes por turno en jornadas de mañana, tarde y noche, junto a mandos, comenzará su actividad de inmediato. El proyecto busca no solo enfrentar el problema del grafiti en tiempo real, sino también enviar un mensaje claro de que estas acciones tendrán consecuencias significativas.
La creación de esta Sección de Protección del Patrimonio Urbano demuestra el compromiso de Madrid en la preservación del patrimonio urbano y la mejora de la calidad visual de la ciudad. La coordinación entre diferentes áreas municipales refleja una estrategia integral que aborda tanto la prevención como la restauración.
Aunque estas medidas son un paso significativo, queda por verse cómo responderán los grafiteros y si las sanciones más severas tendrán el impacto deseado. La ciudad de Madrid espera que este enfoque multifacético logre no solo disuadir el grafiti, sino también restaurar la estética de áreas que han sufrido el impacto de estas acciones vandálicas. La implementación exitosa de estas patrullas podría sentar un precedente para otras ciudades que buscan abordar problemas similares en sus espacios urbanos.